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Renta 2001
Tribuna
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La obligación de declarar

Con el actual impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) se producen sorpresas de última hora cuando personas que no llegan a la suma de la obligación de declarar con un único pagador, sin embargo, se ven avocadas a presentarla y además con cuotas a ingresar.

A veces, resulta complicado trasladar el por qué ganando menos importe mensual que otro trabajador, sin embargo, una persona con un pagador no debe presentar la declaración por el IRPF y otro con dos pagadores sí.

La explicación es técnica. No estar obligados a presentar declaración no significa que no paguemos el IRPF, recordemos que, cada mes, en las nóminas nos descuentan una cantidad a cuenta del pago del impuesto. Lo que hacemos durante el año es pagar a Hacienda por adelantado nuestro IRPF del año.

Uno de los límites más populares acerca de la obligación de presentar declaración es el que afecta al importe máximo de rendimientos del trabajo. Para contribuyentes que durante el ejercicio hayan tenido un solo pagador, el límite es de 21.035,42 euros brutos (3.500.000 pesetas), y para contribuyentes con dos pagadores o más es de 7.813,16 euros (1.300.000 pesetas). Esta variación en las cuantías de rendimientos del trabajo se debe a las retenciones.

Cada pagador calcula la retención por los rendimientos que va a satisfacer a sus empleados de forma individual, es decir, con independencia de que ese mismo empleado tenga otro trabajo por el que perciba otra cantidad de dinero, con su retención correspondiente. Esto significa que las personas con más de un pagador soportan retenciones de forma aislada, sin tener en cuenta el cómputo total de retribuciones que, sin duda, determinaría retenciones mayores.

Las retenciones por rendimientos del trabajo son progresivas, cuanto más se gana mayor es la retención, por lo que el cálculo por separado de las mismas rompe esa progresividad, determinando así una retención menor de la que procedería de computar de forma global la totalidad de rendimientos del trabajo que percibe una sola persona aunque de distintos pagadores.

Ya, para finalizar, apuntar que los contribuyentes que tengan derecho a la deducción por adquisición de vivienda o a la reducción en base imponible por aportaciones a planes de pensiones y quieran hacer valer su derecho están obligados, en todo caso, a presentar declaración.

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