Stoiber advierte que los pagos de Alemania a la UE están al límite
Edmund Stoiber, el rival conservador del canciller Schröder en las elecciones, ha visitado las instituciones comunitarias para intentar contrarrestar cualquier acusación de euroescepticismo. 'Cuando critico a Alemania nadie me acusa de germano-escéptico', declaró ayer en Bruselas.
El candidato aseguró en rueda de prensa que durante 'tres horas y media' se reunió con 'su antiguo amigo', el presidente del Ejecutivo comunitario, Romano Prodi, para explicarle sus ideas sobre Europa. La euroreticencia del presidente de Bavaria se resume en la urgencia de delimitar las competencias de Bruselas y en la renegociación de las aportaciones económicas de Berlín al presupuesto comunitario. Stoiber opina que 'la actual contribución ya no refleja la situación económica de Alemania'.
Los socios europeos deben entender que 'Alemania es una economía débil, con una de las mayores tasas de desempleo [7,9% en 2001] y uno de los índices de crecimiento más bajos [0,6% en 2001]'. 'En esta situación, no es una cuestión de generosidad, sino de posibilidad', defendió Stoiber la reducción de la aportación alemana. 'Hay límites [en lo que se puede pedir a un país', zanjó.
Stoiber defenderá, si llega a la cancillería, una renegociación de toda la política regional de la UE (fondos de cohesión y estructurales) y de la política agraria común, aunque niega que se trate de 'una renacionalización'. 'Pero qué sentido tiene', se pregunta, 'que un país contribuyente aporte dinero y luego lo pida de nuevo en ayudas comunitarias'.