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Consultoría

Azertia, la nueva Indra de BBVA e Iberdrola

Con la absorción de Kristina, Azertia, que saldrá a Bolsa en dos o tres años, se ha convertido en el principal proyecto tecnológico de la Corporación IBV

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a era de las consultoras especializadas en Internet ha dado esta semana un paso más hacia su fin. Kristina Internet Solution, el proyecto de Iberdrola que nació de una alianza estratégica con la a su vez consultora estadounidense Proxicom (hoy, absorbida por la empresa informática Compaq), ya forma parte del obituario de empresas surgidas de la burbuja tecnológica, cuyas consecuencias aún hoy estamos pagando.

Kristina y sus más de 100 consultores han pasado a formar parte de la plantilla de Azertia, en una operación en la que BBVA e Iberdrola han traspasado un total de 14 negocios relacionados con Internet a la Corporación IBV, un entramado empresarial creado al 50% por las dos entidades del que forma parte Gamesa. 'En el momento en que se vivió la gran ola de Internet, Iberdrola y BBVA sintieron la necesidad de participar en este ámbito, pero las circunstancias han cambiado. La decisión de agrupar estas filiales en la Corporación IBV responde a los deseos de conseguir una mejor gestión de sus negocios de Internet', comenta Jaume Dedeu, director de marketing de Azertia.

La división dedicada a tecnologías de la información ha crecido de repente e incorpora una gran variedad de negocios a su cartera, con participaciones en un portal dedicado a pymes como E-Informa o la agencia de viajes de Travelprice. Pero para la Corporación IBV, su gran proyecto en el campo de las tecnologías de la información es Azertia. Actualmente cuenta con 3.000 profesionales repartidos por cinco ciudades españolas, Portugal y Latinoamérica, prevé cerrar 2002 con una facturación de 703.184,16 euros (117 millones de pesetas) y ya es rentable. En un plazo de dos o tres años, la intención de la Corporación IBV es que salga a Bolsa. 'Queremos convertirnos en una empresa de referencia al estilo de Informática de El Corte Inglés o Indra', afirma Dedeu.

Para conseguir este ambicioso objetivo Azertia se ha sometido a un estricto régimen de engorde en los últimos dos años por el que ha ido deglutiendo distintas compañías. Azertia surge en 2000 de la idea de fundir en una única corporación a Centrisa, empresa dedicada a soluciones y servicios informáticos; Keon, especializada en soluciones documentales, y Teleinformática, centrada en soluciones de comercio electrónico entre empresas. El año pasado se reforzó el área de consultoría con la adquisición de Seintex, especialista en gestión judicial, que finalmente se completa con la integración de Kristina.

'Todos estos proyectos son engranajes que encajan a la perfección. Estamos creciendo de manera rápida y ordenada. Nos hemos acostumbrado al cambio, lo que nos permite contar con capacidad de reacción ante el mercado', reflexiona Pablo Benguría, director de planificación estratégica de Azertia, al mismo tiempo que asegura que la integración con Kristina no conllevará ninguna reestructuración de personal.

Kristina va a cumplir un papel importante dentro de la nueva faceta de Azertia. La que fuera filial de Iberdrola asegura tener una buena salud financiera y sus expectativas de facturación prevén unos nueve millones de euros este año. Parece que la crisis de las puntocom no ha dañado gravemente a la compañía. 'Ni Kristina ni Azertia han cotizado nunca en Bolsa. Nuestra única referencia ha sido la cuenta de resultados y no la de ganar valor según las tendencias del mercado', explica Benguría, que cree que hay un importante mercado que necesita de sus servicios.

Servicios móviles

'La demanda ha cambiado. Las nuevas tecnologías no son tan nuevas. Las empresas ya tienen una presencia en Internet, una base de la que parten hacia su transformación digital', comenta Dedeu, que cree que el despliegue de todos los servicios móviles y de acceso a la información desde cualquier lugar van a marcar los nuevos proyectos en los que se embarquen las empresas.

Aunque todavía habrá que esperar a que el sector informático se reanime de la crisis por la que atraviesa, en Estados Unidos se empieza a notar los primeros síntomas de recuperación, pero en España todavía habrá que esperar a hasta el próximo año para que las empresas amplíen sus presupuestos dedicados a las tecnologías, según las previsiones de Azertia. 'En estos últimos meses se ha notado un fuerte parón de las inversiones en tecnología dentro de las empresas, y nosotros no esperamos una recuperación definitiva hasta finales de año', comenta Dedeu, que destaca el gran papel de la Administración pública como gran consumidor tecnológico, que está sirviendo para alegrar las cuentas de muchas empresas informáticas.

Gestión única para 14 empresas de gran riesgo

 

Corporación IBV ha heredado de sus creadores, BBVA e Iberdrola, una variada selección de empresas y participaciones en negocios virtuales o de comercio electrónico. Entre ellas se encuentran negocios de lo más variopintos, que van desde Shopnet, dedicada a la venta de seguros en línea del que el Iberdrola posee un 16,7%, hasta Buongiorno-Myalert, que se dedica a servicios móviles de información y publicidad, en la que el BBVA participa a través de su fondo Evcisa.

 

 

 

 

 

 

 

Por el momento, la corporación IBV tiene la intención de conservar su presencia en tan dispares negocios, a pesar de un futuro cuando menos difícil dada la actual situación del comercio electrónico en España.

 

 

 

'El mercado decidirá qué proyectos se mantienen y cuáles no tienen ninguna viabilidad', opina Jaume Dedeu, director de marketing de Azertia. 'Todos nuestros proyectos están orientados a la rentabilidad. No estamos dedicándonos a las tecnologías por amor a la tecnología', recalca.

 

 

 

Sin embargo, la Corporación IBV no teme que el incorporar en su estructura estos proyectos suponga un lastre para sus cuentas, sino todo lo contrario, les va a permitir un mayor ahorro de costes. 'La integración de todos las empresas de Internet en una misma organización permite una gestión conjunta más eficaz en la que se aprovechan importantes sinergias que finalmente se traducen en importantes ahorros', añade Pablo Benguría.

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