Desinformación en Wall Street

Cada vez es más difícil para los analistas de Wall Street justificar que ignoraban totalmente lo que pasaba cuando promocionaban aquellas dudosas puntocom hasta que explotó la burbuja. En la declaración jurada en el proceso abierto esta semana por el fiscal de Nueva York Eliot Spitzer se proveen evidencias para una explicación de este fenómeno que son más complicadas: que los departamentos de análisis de las entidades bancarias y de intermediación están demasiado cegados por los conflictos de intereses como para hacer un análisis objetivo de las empresas (...).

Nada sugiere que las prácticas de Merrill Lynch fueran particularmente atroces. Spitzer está analizando las prácticas de otras firmas de Wall Street. Puede decidir ir adelante con procesos penales o civiles, pero independientemente sus investigaciones deben convencer a los reguladores de que se necesita hacer más para proteger a los inversores y la integridad de los mercados financieros de la nación