Los Rolls Royce sólo se compran en Marbella

Un concesionario marbellí vendió los seis Rolls Royce matriculados en España en 2001 y lideró las ventas de Maserati, con un negocio superior a los 30 millones

El año pasado se matricularon seis Rolls Royce en España. Los seis salieron del concesionario de Marbella C. de Salamanca. Esta empresa, que también posee sucursales en Málaga y Madrid, vendió el año pasado en Marbella cinco de los 11 Bentley que se matricularon en España, 133 vehículos Jaguar (el 6,1% del total de matriculaciones), convirtiéndose así en la cuarta concesión española en esta marca.

Lideró la venta de Maserati, con 11 unidades, y de sus oficinas salieron la mitad de los 18 Aston Martin matriculados en 2001. Además el grupo Volkswagen ha destacado esta sucursal por ser la segunda de Europa, tras Hamburgo (Alemania), que mejor ha cumplido los objetivos empresariales marcados para 2001.

El buen ritmo del negocio ha permitido a esta sociedad elevar sus ventas en el concesionario hasta los 30,6 millones, cantidad que representa un incremento del 20% respecto 2001. El gerente de la empresa, José Carlos Salamanca, apunta que en ventas absolutas de Rolls Royce 'posiblemente seamos superados sólo por Mónaco'.

La razón por la que un concesionario de la Costa del Sol figura entre los primeros puestos en la venta de vehículos de lujo es simple: el elevado número de extranjeros, especialmente británicos y alemanes, residentes en esta zona de Málaga, con una capacidad adquisitiva que les permite hacerse con un vehículo como el Rolls, difícil de conseguir por menos de 180.000 euros.

La progresiva expansión del fenómeno conocido como turismo residencial en Marbella y los municipios del entorno ha tenido como consecuencia adicional que se disparen las ventas de otros artículos de lujo.

José Carlos Salamanca tiene una teoría: 'Por lo general, el turista europeo jubilado que opta por comprar una casa en Marbella o alrededores para trasladarse a vivir todo o parte del año, destina el 15% del precio de la vivienda a la adquisición de un coche'. O sea, que 'si gasta seis millones de euros en un chalé, tiene un presupuesto de 900.000 euros para emplear en coches'.

Actualmente, la clientela europea representa el 50% de las ventas de automóviles de la gama media-alta en la Costa del Sol. Este porcentaje, sin embargo, se dispara hasta el 70% en el segmento de coches de lujo.

La existencia de esta demanda extranjera, 'que además es muy fiel', mantiene a C. de Salamanca a salvo de la crisis que azotan al sector automovilístico. 'Si el mercado español ha bajado un 15%, en Marbella se ha notado mucho menos', apunta el gerente de la empresa.

Aunque, eso sí, reconoce que desde el atentado contra las Torres Gemelas del pasado 11 de septiembre 'se ha perdido la alegría'. Esta 'pérdida de alegría' se traduce, fundamentalmente, en que se ha readecuado la oferta y la demanda, de modo que se han minimizado las listas de espera registradas años atrás.

'A lo mejor sí hay algún modelo de Ferrari para el que hay que esperar un año y ya hemos empezado a recibir algunas reservas para coches de la marca Bentley para el año 2003, pero se han regularizado mucho las listas de espera', precisa José Carlos Salamanca.