La directiva sobre abuso de mercado no sancionará la información errónea
Pese a que acaba de iniciarse su tramitación, la futura directiva sobre abuso de mercado ha sufrido ya importantes modificaciones. El Parlamento Europeo ha ratificado el texto en primera lectura tras acordar que la futura ley sólo sancionará la manipulación deliberada del mercado, y no los meros errores en la difusión de información como se preveía inicialmente.
Los europarlamentarios han dejado bien claro su deseo de que la futura ley sobre información privilegiada y abuso de mercado no reste flexibilidad a los mercados ni imponga excesivas cargas a sus operadores. Así, el texto ha pasado el trámite de primera lectura del Parlamento Europeo enriquecido con una serie de enmiendas que ya han sido bien acogidas por el comisario de Mercado Interior, Frits Bolkestein, y que ahora deberán ser respaldadas por la Comisión Europea.
La primera de estas modificaciones excluye del grupo de conductas sancionadas los errores involuntarios en la difusión de la información y limita las multas a la manipulación deliberada de ésta. Así, la futura directiva define como manipulación de mercado las operaciones u órdenes que por distintos mecanismos consigan que el precio de los instrumentos financieros se sitúe en un nivel artificial, pero puntualiza que la definición no se refiere 'al comportamiento de una persona que actúe exclusivamente por motivos legítimos y que tenga en cuenta el modo de proceder aceptado en el mercado'.
Además de esta modificación, la Eurocámara suprime la disposición que permitía a los Estados miembros introducir normas específicas para los periodistas. La justificación de la enmienda señala que las disposiciones que contenía la directiva no eran claras y estigmatizaban 'a una profesión en particular'.
Fuerte rechazo
Ambos aspectos del texto inicial, la sanción de errores involuntarios y la inclusión de los medios de comunicación, provocaron un fuerte rechazo entre los medios y la prensa europea, que el pasado mes de noviembre exigieron a Bruselas que introdujera el requisito de intencionalidad como condición indispensable para sancionar la conducta y excluyera los errores involuntarios.
'Los medios europeos no se oponen a que los periodistas, como todos los ciudadanos, sean responsables de la información que conscientemente difundan con la intención de manipular el mercado', puntualizaban en un comunicado. Otra de las grandes modificaciones que ha introducido ahora la Eurocámara es la exigencia de que los directivos de compañías con valores en el mercado informen a las autoridades competentes de las operaciones particulares que realicen en cualquier instrumento de su propia empresa, una obligación que ya se contempla en la legislación española.
Los europarlamentarios consideran que la medida servirá para prevenir el uso de información privilegiada por parte del personal de dirección y ayudará a los inversores a conocer 'el justiprecio' de una empresa en los mercados'.
La justificación que da la Cámara europea es que existen estudios que demuestran que las inversiones de personal de las propias empresas obtienen mejores rendimientos que las de los demás inversores. Además, la Eurocámara recuerda que el mecanismo lleva décadas funcionando satisfactoriamente en Estados Unidos.