Gas Natural advierte que no está obligada a garantizar el suministro a todas las centrales de ciclo combinado
El consejero delegado de Gas Natural, José Luis López de Silanes, aseguró que el suministro a las centrales de ciclo combinado que el grupo gasista tiene en construcción está garantizado, pero advirtió de que la compañía no tiene "en exclusiva" la responsabilidad de garantizarlo para todas las centrales de ciclo combinado que se construyan en España. A este respecto, López de Silanes indica -en una entrevista publicada en el último número de la revista "Montajes y Mantenimientos Industriales"- que el suministro a sus centrales está asegurado, ya que el grupo cuenta con una cesta de contratos de gas natural licuado (GNL) y de gas por gasoducto "equilibrada y diversificada", que le garantiza los aprovisionamientos necesarios.
Considera que el sector energético "debería planificar su futuro de una forma racional" que asegure el equilibrio entre oferta y demanda y que permita definir el desarrollo de las infraestructuras gasistas de una forma adecuada para cubrir las necesidades de estas nuevas centrales. En este sentido, señala que la compañía ha pedido "una mayor definición" de los proyectos de ciclo combinado, "porque para suministrar gas a las centrales primero hay que saber cuántas son y dónde se van a instalar.
Gas Natural SDG y Repsol YPF tiene en construcción cuatro centrales de ciclo combinado en las comunidades de Andalucía, Murcia, Cataluña y País Vasco, con una potencia total de 1.600 Mw, lo que supone el 30% de toda la potencia de generación que se está construyendo en España. La de San Roque (Cádiz), será la primera central con esta tecnología que entrará en funcionamiento en España. El objetivo para los próximos cinco años es continuar creciendo en el sector gasista y alcanzar una cuota del mercado de generación y comercializacion de electricidad superior al 10% y 500.000 clientes, con una potencia de generación instalada en torno a 4.000 MW.
López de Silanes afirma que la estrategia del grupo de cara al año 2005 se centra en convertirse en una "gran multinacional de servicios energéticos", tanto de gas como de electricidad y, al mismo tiempo, entrar en el campo de las telecomunicaciones y los servicios del hogar a través de las nuevas tecnologías.
La compañía tiene previsto pasar de 7 a 10,5 millones de clientes en España y Latinoamérica en el año 2005. En España prevé pasar de 3,6 millones a 5 millones de clientes, con unas ventas totales de 24 bcm, y en Latinoamérica prevé llegar en 2005 a los 5,5 millones de clientes desde los 3,4 millones actuales y duplicar el volumen de ventas mediante el desarrollo del uso del gas natural para vehículos y la generación de electricidad mediante centrales de ciclo combinado.