Commerzbank y Dresdner Bank rechazan el plan de rescate de Holzmann
Si bien, un grupo de bancos acreedores anunció hoy que condonarán a esta constructora deudas por valor de 100 millones de euros (88 millones de dólares) para aliviar su difícil situación financiera. Ayuda que mejorará la base del capital propio de Holzmann, casa matriz de la constructora española Jotsa, y aportará margen financiero para una eventual venta de la compañía, según los expertos.
La empresa alemana sigue negociando con los bancos acreedores un plan de saneamiento diseñado por el Deutsche Bank para sacar a la firma de la crisis.
Commerzbank y Dresdner Bank, dos de las entidades acreedoras, confirmaron hoy su rechazo al plan de saneamiento. Según fuentes bancarias, el plan de saneamiento discutido por los 17 bancos acreedores de la constructora sirve únicamente para "tapar agujeros y se hundirá como muy tarde a mediados de abril". La suspensión de pagos es, según esta fuente, "la solución más sabia".
Esta solución no significaría "la pérdida de los 23.000 empleos con los que cuenta Holzmann, sino que persigue salvar algunas partes buenas del grupo". Según esta misma fuente, el grupo bancario HypoVereinsbank rechaza igualmente el plan de rescate. Si no se produce rápidamente una inyección financiera, a la compañía germana no le quedara otra solución que poner en marcha la suspensión de pagos.
Holzmann, que atraviesa graves dificultades financieras y acumula una deuda de 1.600 millones de euros (1.400 millones de dólares), tuvo que suspender pagos hace dos años y sólo logró salir a flote con la ayuda del Gobierno alemán. Ahora no se descarta que el grupo tenga que acabar declarándose insolvente.
Según fuentes del sector, las pérdidas podrían haber alcanzado el pasado año los 199 millones de euros (175 millones de dólares), frente a los 79,8 millones de euros (70,2 millones de dólares) del año anterior, debido a la debilidad del sector alemán de la construcción durante el pasado ejercicio.