La balanza comercial de Francia registra en enero un superávit de 1.305 millones de euros
Francia registró un excedente de su balanza comercial de 1.305 millones de euros en enero pasado, según la Dirección general de Aduanas.
En diciembre de 2001, el superávit de los intercambios comerciales franceses con el exterior se situó en 414 millones de euros, señaló la fuente, al revisar considerablemente a la baja el excedente de 814 millones anunciado inicialmente.
En enero, las exportaciones francesas se cifraron en 26.192 millones de euros, lo que refleja una reactivación con respecto a diciembre (24.571 millones), destacó la Dirección general de Aduanas.
Al contrario que en los meses precedentes, las ventas de automóviles bajaron, mientras que en la mayor parte de las otras ramas hubo un avance, incluido en la agroalimentaria, que alcanzó un "alto nivel".
La subida de las exportaciones hacia los otros países de la Unión Europea (UE) es "importante" (15.856 millones de euros, es decir, un excedente de 1.605 millones), aunque en términos generales las ventas siguen situándose a un "nivel bajo".
En sus intercambios comerciales con España, Francia tuvo un superávit de 338 millones de euros en enero. Con el Reino Unido fue de 893 millones, y con Bélgica y Luxemburgo, de 308 millones.
En cambio, tuvo un déficit de 257 millones con Irlanda y de 232 millones con Alemania.
El avance de las exportaciones francesas hacia países no comunitarios, en particular Estados Unidos (un excedente de 223 millones de euros), dio el principal impulso al aumento de las ventas en enero.
La reactivación de las importaciones francesas en enero, que se cifraron en 24.887 millones de euros, estuvo menos marcada que la de las exportaciones, añadió Aduanas.
Las compras de vestimenta, equipamientos para el automóvil y para el hogar, aumentaron de forma sensible, mientras que las de bienes intermedios, que hasta ahora caían fuertemente, estuvieron casi estables en enero.
Las importaciones francesas de países de fuera de la Unión Europea experimentaron una clara reactivación en enero, en particular las procedentes de Asia y Africa.
En cambio, las compras francesas de productos de países de la UE siguieron bajando, especialmente en Bélgica, Holanda y el Reino Unido.