La desaceleración económica moderó el año pasado las compras con Visa
Los pagos en comercios con tarjetas de Visa International (incluye las de 4B) aumentaron un 15,2% el año pasado, hasta 30.866 millones de euros, un frenazo de seis puntos frente a 2000, a causa del enfriamiento económico. La sociedad de medios de pago lanzará este año un sistema que permitirá cargar las compras a la tarjeta de otro titular.
La ralentización de la economía ha minado el crecimiento de los pagos con tarjeta de Visa International (que incluye también las de 4B) en España. El gasto en comercios el año pasado aumentó un 15,2%, hasta 30.866 millones, seis puntos menos frente al incremento del 21,1% del año 2000.
En cuanto al gasto total realizado por los 28,6 millones de tarjetas Visa en España (incluye retirada de efectivo en cajeros), subió un 12,4% el año pasado, hasta 67.658 millones de euros.
En Europa, el enfriamiento económico también se ha notado en el volumen total de gasto (683.000 millones de euros), que se incrementó dos puntos menos que en 2000, un 17,5%.
Los atentados del 11 de septiembre también afectaron al negocio y disminuyeron las operaciones entre países europeos, sobre todo por la caída del turismo, especialmente, el procedente de EE UU.
El comienzo de este ejercicio está marcado por la introducción del euro, que incrementó un 27% las operaciones en todas los países europeos. Si bien esto se contradice con el dato general del sector de medios de pago en España, que ha constatado un decrecimiento en el volumen de compras con tarjeta, contrario al efecto esperado.
Pagos entre particulares
Como principal novedad, Visa Internacional prevé lanzar este mismo año un nuevo sistema de pago entre particulares. Con él, será posible cargar compras de pequeña cuantía (por ejemplo, la reserva de entradas de cine) en la tarjeta de otro titular, así como transferencias, explicó ayer José San Juan, director general de Visa Europa para España.
El fraude con tarjetas falsas costó a las entidades españolas 18,5 millones de euros el año pasado, es decir, cada tarjeta tuvo un coste de 66 céntimos. Aunque esta cifra está muy por debajo de la media europea. El total en Europa ascendió a 397 millones de euros.
El objetivo en toda Europa es duplicar el pago en comercios y pasar de representar el 8% del gasto total al 16% en cinco años, según explicó ayer Stephen Perry, vicepresidente de Visa Internacional en Europa.
La UE, favorable a las tasas de intercambio
La Comisión Europea ya anunció el pasado mes de agosto su intención de fallar a favor de Visa International en el conflicto que mantiene con Eurocommerce. Esta asociación de comercios europeos presentó una denuncia en 1997 contra las tasas de intercambio (las que se cobran las entidades financieras) que luego la banca les repercute en forma de comisiones (la denominada tasa de descuento).
El comisario europeo de Competencia, Mario Monti, resolverá en breve si las tasas de intercambio van contra la competencia, según dijo ayer a este diario una portavoz de esta comisaría. A finales de 2001 se desató una fuerte polémica porque Visa España subió estas tasas para compras a débito en grandes superficies. Eurocommerce se plantea presentar otra denuncia por estas tasas pero ante el Tribunal de Justicia de la UE. Aunque lo único que podría recurrir esta asociación en esta instancia es la decisión final de Monti, no las prácticas de Visa, según fuentes de esta institución, informa Bernardo de Miguel.