"No vamos a permitir que Europa pague la recuperación americana"

El secretario de Estado de Comercio y Turismo asegura, en vísperas del Consejo Europeo de Barcelona y la reunión de ministros de Comercio en Toledo, que los objetivos de la presidencia española en política comercial están cumplidos y anuncia máxima firmeza frente al proteccionismo de EE UU

Acaba de estrenar despacho en el Ministerio de Economía. Sobre la mesa de trabajo se acumula una montaña de informes y documentos que debe revisar en los paréntesis que le dejan los múltiples viajes. Son una obligación inherente al cargo, y más en tiempos de presidencia de la UE. Nacido en Castellón hace 38 años, Juan Costa cumplirá en mayo dos años como secretario de Estado de Comercio y Turismo.

¿El Consejo Europeo de Barcelona y la reunión de ministros de Comercio de Toledo van a servir para que la UE asuma como propias las prioridades españolas de cooperación euromediterránea y la creación de un banco de desarrollo para esta región?

Los objetivos de la presidencia española en la política mediterránea parten de dos realidades. El crecimiento demográfico de los países del Mediterráneo, que va a exigir un crecimiento económico en la zona capaz de absorber 45 millones de empleos, y la necesidad de desarrollar el sector privado en los países del norte de África como instrumento para garantizar la estabilidad y el crecimiento económico en la zona. Para cubrir estas necesidades es necesario crear un marco que favorezca la inversión europea en la región y que amplíe las posibilidades de comercio y cooperación económica. Esto, desde el punto de vista de medidas concretas a impulsar desde la presidencia, supone avanzar más en la liberalización del comercio, estableciendo un nuevo marco de reglas de origen que permita acumular bienes producidos en un país que luego son transformados en otro para destinarse a los mercados de la UE. æpermil;sta es una medida concreta que nosotros esperamos sacar en la Cumbre de Toledo.

¿Y el banco de desarrollo?

Desde la presidencia española pretendemos también que Europa dedique recursos al desarrollo del sector privado en los países de la ribera sur del Mediterráneo. En estos momentos, las prioridades de los operadores económicos en la zona se dirigen más al sector público para infraestructuras y proyectos sociales y no hay mecanismos especializados para compartir riesgo con el sector privado. Ahora estamos debatiendo con nuestros socios europeos cuál es el mejor mecanismo para instrumentar esa necesidad de recursos al sector privado, en la que estamos ya de acuerdo y, tanto si se materializa a través de una filial del Banco Europeo de Inversiones o como una facilidad financiera específica del BEI, creo que el objetivo inicial está conseguido.

Hablando del Mediterráneo, ¿está influyendo el contencioso que, a nivel diplomático, mantiene Marruecos con España en la relación económica bilateral?

A nivel económico, nosotros seguimos haciendo nuestro trabajo. Hemos ejecutado todo el programa de conversión de deuda en los últimos meses. Hemos abierto una oficina de Cofides en Marruecos que va a permitir detectar oportunidades de inversión y contribuir a la financiación de proyectos privados en ese país. Por tanto, la cooperación económica sigue en marcha y hemos cumplido con los objetivos que nos marcamos en 2001.

La segunda prioridad geográfica de la presidencia española es América Latina. ¿Se va a cerrar en este semestre el acuerdo de libre comercio con Chile?

Nuestro objetivo es seguir apurando la negociación con Chile y que en la próxima cumbre Unión Europea-América Latina-Caribe esté cerrado un acuerdo político con este país para la constitución de esa zona de libre comercio. Todavía hay algunos puntos que no están cerrados, pero confío en que seremos capaces de ponernos de acuerdo en las próximas semanas. Con Mercosur la situación es más complicada

¿Hay optimismo en el Gobierno español respecto a una pronta solución de la crisis de Argentina?

En el caso de Argentina Europa está estudiando algunas medidas comerciales en el marco de las reglas de la Organización Mundial del Comercio para dar a los productos argentinos mayores posibilidades de acceso a los mercados europeos. En concreto, estamos impulsando ya la ampliación del contingente de importación de carne de vacuno para este año. Lo que es importante para América Latina, en general, y para Argentina, en particular, es mantener la confianza de los inversores internacionales. Por eso, es esencial que la política económica que el Gobierno argentino vaya a impulsar garantice los derechos económicos de los inversores que operan en el país y que, al mismo tiempo, ponga de manifiesto el compromiso del país de hacer un esfuerzo para salir adelante.

¿Cuál va a ser la respuesta de la UE a la política proteccionista de EEUU con las restricciones al acero y las amenazas hacia otros productos como los agrícolas y los semiconductores?

Puedo asegurar que vamos a actuar con la máxima firmeza y ésta es la propuesta que la presidencia española ha trasladado a la Comisión Europea. Vamos a denunciar a Estados Unidos ante la OMC y vamos a pedir compensaciones a pesar de que la incidencia de las medidas sobre el acero son limitadas para el conjunto de la UE y para España. También estamos decididos a adoptar medidas de salvaguardia para evitar que se produzcan desviaciones de terceros países al mercado europeo. Lo que no podemos permitir es que Estados Unidos pretenda que el esfuerzo de la reestructuración económica que está obligado a realizar lo pague Europa y la comunidad internacional.

Estas actuaciones unilaterales norteamericanas ¿no obligarían a repensar el papel de la Organización Mundial del Comercio y su funcionamiento?

En la Cumbre de Doha ya debatimos esta cuestión. Hay que garantizar más eficacia y más transparencia en el seno de la OMC, más rapidez en la resolución de los conflictos y más protección de los derechos de todos los países miembros. Lo que en nuestra opinión es absolutamente desafortunado es que, en un contexto en el que hemos lanzado una nueva ronda para la liberalización del comercio mundial, que también tiene que ser una ronda del desarrollo, EE UU adopte medidas para la protección de sectores concretos. Por eso Europa está absolutamente decidida a reaccionar con firmeza y con rapidez ante esta situación.

Los créditos para internacionalización se activarán en breve

 

 

El secretario de Estado de Comercio enmarca la fuerte ralentización de las exportaciones españolas en el segundo semestre de 2001, alcanzando en noviembre los peores resultado en 10 años, a la desaceleración del comercio mundial durante el último ejercicio. ¢Hemos pasado de una tasa de crecimiento de l2% del comercio mundial en 2000 a un año 2001 en que las últimas estimaciones indican que el crecimiento del comercio se va a situar en torno al 1%¢, afirma para añadir que ¢lo importante es que el año pasado las exportaciones españolas crecieron el doble de lo que ha crecido el comercio mundial y vamos a mejorar nuestra cuota de participación en los intercambios comerciales en el mundo¢.

 

 

 

Juan Costa es también optimista respecto a una recuperación a corto plazo y no duda en señalar que ¢en el año 2002 se va a producir un cambio de tendencia en el comportamiento de las exportaciones y esta desaceleración de nuestras exportaciones va a cambiar. Lo que espero es que decisiones como las de EEUU en el ámbito del acero o de los cítricos no se conviertan en un obstáculo para una evolución positiva del comercio mundial en el año 2002¢. Respecto a los instrumentos de apoyo a la actividad de las empresas españolas en el exterior, anuncia la próxima reactivación de La Línea del ICO para la internacionalización de las pymes, que el año pasado dejó de funcionar. Aclara a este respecto que ¢el proyecto de Presupuestos del Estado incluye ya un crédito para financiar directamente las subvenciones de tipos de interés de la línea para no cargárselo al fondo de provisión del ICO, y a finales del año se adoptó un nuevo acuerdo del consejo de administración del instituto para reactivar la línea.

 

En estos momentos existe ya un acuerdo del Gobierno para llevarlo a la comisión delegada y, por lo tanto, yo espero que esté operativa en las próximas semanas¢.