Zapatero se compromete a que la política del PSOE lleve el sello de UGT
La inauguración del 38 Congreso Confederal de UGT fue escenario ayer de un reencuentro. El PSOE y UGT revivieron los tiempos en que caminaban de la mano. El secretario general de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió a que sus políticas lleven la marca de UGT, a lo que el secretario general del sindicato, Cándido Méndez, respondió con elogios a la forma de hacer política del líder socialista. El anfitrión tuvo palabras cálidas para la patronal y más frías para el secretario general de CC OO, José María Fidalgo.
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se convirtió ayer en el invitado que más entusiasmo despertó entre los 732 delegados acreditados que asistieron a la inauguración del 38 Congreso Confederal de UGT, en el que se reelegirá a Cándido Méndez para su tercer mandato al frente de la central.
Rodríguez Zapatero revivió ayer los tiempos de hermanamiento de la UGT y el PSOE anteriores a la sonada ruptura entre Felipe González y Nicolás Redondo.
Tras las intervenciones del ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, y el secretario general de CC OO, José María Fidalgo, subió al estrado del Palacio de Congresos de Madrid (donde se celebrará hasta el sábado el congreso de UGT) el líder de los socialistas, animado por gritos de 'dale caña' de los delegados ugetistas.
Pero después de la 'caña' de Zapatero al Gobierno y, en particular, a su presidente, José María Aznar, al que acusó insistentemente de 'mentiroso', llegaron las promesas a UGT, 'que también es mi sindicato', dijo el líder socialista.
Convencido de que ganará las próximas elecciones generales dentro de dos años, Rodríguez Zapatero se comprometió a que la política socialista 'tendrá una buena marca y un buen sello de UGT'. En el terreno práctico, prometió a los sindicatos que tendrán 'una mayor representación institucional' en la construcción de la sociedad española y mostró su deseo de que Méndez y él construyan 'juntos' un sistema público de pensiones 'más justo, avanzado y sólido'.
En el buen camino
La respuesta de Méndez fue inmediata y llegó en forma de elogios a la persona y a la forma de hacer política de Rodríguez Zapatero. Además de resaltar sus sintonías personales, Méndez alabó que el líder socialista 'no quiera acorralar y derribar al adversario a golpes de dialéctica, sino que prefiera aprovechar sus errores y carencias para derrotarle democráticamente' y añadió que 'está en el buen camino' y que tiene 'un buen discurso y un buen estilo'.
Tampoco fue casual que Méndez iniciara su intervención ensalzando al presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas. Según dijo, los continuos esfuerzos por pactar con los empresarios, muchas veces con éxito, son 'síntoma de normalización democrática'.
Sin embargo, las palabras dirigidas al líder de CC OO no fueron tan cálidas ni conciliadoras, aunque comenzó calificándole de 'compañero y amigo'. Méndez se disculpó diciendo que aunque quiere construir el futuro junto a CC OO ayer era día para mirar al pasado. Dicho esto, comenzaron las críticas al Gobierno y a Fidalgo.
El primer reproche a su homólogo de CC OO fue el de haber firmado el último acuerdo de pensiones con el Gobierno y la patronal. 'Fue un acuerdo que se fraguó en un mes para tapar la imposición unilateral (por parte del Ejecutivo) de la reforma laboral, que dejó fuera todos los objetivos sindicales y no fijó un marco jurídico que generalizara el derecho a la jubilación anticipada', criticó Méndez.
En segundo lugar, echó en cara a Fidalgo que CC OO no respaldar la propuesta de UGT de hacer una huelga general en protesta por la reforma laboral y la intención del Gobierno de reformar también los convenios de forma unilateral.
34 movilizaciones
Acto seguido, enarboló la bandera de las 34 grandes movilizaciones protagonizadas por UGT en el último trienio para dejar claro que 'a nosotros no se nos puede decir que no nos movilizamos'. Esto fue una implícita pero clara referencia a los reproches de excesivo pactismo que lanzan a CC OO desde diferentes sectores.
Méndez dio la puntilla a estos reproches al indicar su intención de 'huir de la retórica unitaria' y resaltar la necesidad de buscar 'otras fórmulas de unidad de acción concretas' y no como algo que se presupone. Sin embargo, la intervención de Fidalgo fue más conciliadora y orientó sus críticas a los empresarios que 'no están dando respuestas inteligentes para mejorar la competitividad de las empresas, a cambio de nuestro esfuerzo para moderar salarios'. Ensalzó la propuesta de UGT para este congreso consistente en hacer paritaria la presencia de la mujer en su ejecutiva y terminó diciendo: 'Contad con la mano tendida de Comisiones Obreras, viva la unidad y viva la lucha sindical'.
Por su parte, Méndez también vertió duras críticas al Gobierno, al que acusó de haber 'calcinado en la hoguera de sus vanidades, el diálogo social, tal y como lo concebía en la anterior legislatura'.
El himno de 'La Internacional',a ritmo de flautas
La orquesta de flautas de la escuela sindical de UGT Julián Besteiro se encargó ayer de dar un original pistoletazo de salida al 38 Congreso Confederal del sindicato.
Como no podía ser de otra manera, la última de las cinco piezas que interpretaron fue La Internacional, que puso en pie a todos los delegados asistentes. Sin embargo, no todos ellos entonaron la letra y tampoco se vieron tantos puños en algo como en anteriores congresos. Así quedaba inaugurado el congreso que durará hasta el sábado.
Cuevas asistió, pero fue el único que no intervino
El presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas, acudió ayer, por primera vez desde que ocupa el cargo, a un congreso confederal de UGT. Su presencia fue en 'justa correspondencia' a la asistencia de Méndez a la última asamblea electoral de la CEOE que reeligió a Cuevas. Sin embargo, fue el único dirigente social de los que asistieron que no intervino en el acto de inauguración de este congreso. Quien intervino pero se marchó tras su discurso fue el titular de Trabajo, Juan Carlos Aparicio.
Méndez da sus recetas para hacer política en el País Vasco
La política y el sindicalismo que se practica en el País Vasco fue también un tema recurrente por varios de los intervinientes ayer en la inauguración del congreso ugetista. La recomendación más directa fue la de Cándido Méndez, que en presencia de su predecesor, Nicolás Redondo, padre del ex secretario general de los socialistas vascos, recomendó a los socialistas vascos la necesidad de 'plantear una alternativa social frente a la derecha, nacionalista o no nacionalista'.
E insinuó que la imposición de la reforma laboral pudo influir en el fracaso de los partidos no nacionalistas.