Rato confía en que París acepte liberalizar la energía en breve plazo
El vicepresidente segundo y presidente de turno del Ecofin, Rodrigo Rato, considera 'aceptable' la liberalización parcial del sector energético impuesta por Francia y confía en que la cumbre de Barcelona permita establecer plazos 'cortos' para la reforma de los sectores de gas y electricidad.
El documento consensuado por los Quince sólo tiene una palabra entre corchetes (el indicador tradicional de falta de acuerdo), y dicho vocablo es empresas. Aparece en el párrafo que propone 'fijar un calendario para que en el consejo de primavera se garantice el acceso (de las empresas) a un suministrador de su elección'.
Francia insiste en incluir esta palabra, con lo cual deja fuera a los usuarios particulares y restringe la liberalización a un 60% del mercado. Según explicó Rato en un encuentro con periodistas, 'con que liberalicemos un 60% del mercado en fechas más o menos similares y haya un aumento de las interconexiones, a nosotros nos va bien'.
Para la presidencia española, el objetivo fundamental es conseguir que se fije una fecha concreta para liberalizar los sectores de gas y electricidad, y que los plazos previstos sean 'cortos'. Con tal de conseguirlo, ha aceptado que se combine la apertura de mercado de energía con una armonización fiscal que se traducirá en un aumento de costes para el ciudadano.
A pesar de la restricción impuesta por Francia, el titular de Economía asegura que el documento es 'muy ambicioso' porque 'hace un año no se aceptaba debatir sobre liberalización de los servicios de red con objetivos y calendarios' concretos. Además, incluye importantes reformas liberalizadoras para los mercados laboral, de transporte aéreo y servicios financieros. Y todo ello en un año en el que cuatro países afrontan elecciones (Alemania, Portugal, Holanda y la propia Francia).
En cuanto al relevo en la presidencia del BCE, Rato sugirió que ya existe consenso para que Francia nombre al sustituto de Wim Duisenberg en 2003.