Los trabajadores de Flex de Bilbao y Valencia rechazan los traslados
Los trabajadores de los centros de producción de Flex en Valencia y Bilbao han comunicado a la compañía su rechazo al plan de traslados que ha propuesto la empresas ante su intención de cerrar las dos plantas para volver a beneficios.
La empresa ha anunciado su intención de trasladar la producción de colchones de estos centros a su planta madrileña y ha ofrecido a los trabajadores afectados, 101 en Bilbao y 140 en Valencia, la posibilidad de trasladarse a Madrid, donde la empresa tiene una planta infrautilizada o, en su caso, acogerse a un plan de prejubilaciones.
Según Emilio Lamas, de CC OO, 'la oferta de traslado de los empleados a la planta de Madrid es tramposa, ya que las plantillas tienen una media de edad muy avanzada y es muy complicado que accedan a cambiar de lugar de trabajo'.
El responsable sindical explicó que la intención del comité es intentar que se elabore un plan de viabilidad para las factorías afectadas por el plan de reestructuración de Flex. 'Sin embargo, estamos encontrándonos con una empresa completamente cerrada en banda a cualquier negociación', señaló Lamas.
La decisión de Flex de cerrar estas dos fábricas -y su posterior venta, según los sindicatos- obedece a los malos resultados acumulados en los últimos 10 años con pérdidas. Además, según fuentes de Comisiones Obreras, la empresa también quiere centrar toda la actividad en sus instalaciones de Madrid.