El partícipe toma aliento
Los inversores suscribieron fondos en febrero por valor de 1.262 millones de euros. De esta cifra, 726 millones se dirigieron a productos de renta variable
El partícipe español de fondos de inversión ha dado en febrero una sana muestra de madurez financiera. El mal fario que acompaña a los mercados de valores desde hace ya dos años no ha hecho sino aumentar las pérdidas que acumulan los fondos de inversión y, a pesar de ello, numerosos partícipes han optado este mes por suscribir productos de esta índole, ante las perspectivas de un rentable rebote de los mercados a medio plazo. Según los datos del Barómetro de Cinco Días, el sector de los fondos de inversión recibió en febrero unas suscripciones netas por valor de 1.262,67 millones de euros, si bien la depreciación de las carteras supuso una merma patrimonial de 1.002,22 millones de euros. El saldo, con todo, es positivo y arroja un leve crecimiento del patrimonio total de los fondos de inversión de 240,44 millones de euros.
Febrero ha sido un mes de ida y vuelta para los mercados de valores. Las pérdidas con que se iniciaba el periodo, al hilo de la desaceleración que campa a sus anchas por las economías de todo el mundo, se fueron diluyendo a medida que avanzaban las semanas, con un empujón final, el de los últimos días, motivado por las palabras de Alan Greenspan, que confirmaba el inicio de una lenta recuperación de la mayor economía del mundo. Pese a ello, la mayoría de los grandes índices bursátiles ha cerrado el mes con descensos, aunque bien es verdad que han sido muy leves, casi en ningún caso superiores al 1%.
Esta trayectoria no ha pasado inadvertida al sector de los fondos de inversión, que ha visto disminuir su patrimonio 1.002,22 millones de euros en concepto de depreciación de las carteras. El partícipe, sin embargo, ha hecho gala de una interesante madurez financiera que supera sobradamente el millardo de euros. Una vez más, como viene sucediendo en los últimos meses, los fondos de corte más conservador recibieron mayor número de suscripciones, a pesar de que el bajo nivel a que están los tipos de interés en estos momentos resta atractivo a estos productos. Los fondos monetarios recibieron en febrero aportaciones por valor de 434,61 millones de euros, y los de renta fija a corto plazo, 321,2 millones de euros.
Lo realmente novedoso del mes de febrero ha sido la evolución patrimonial mantenida por fondos de corte más agresivo, como son los de renta variable. Anticipándose a una recuperación ya anunciada por el presidente de la Reserva Federal estadounidense, los inversores han suscrito fondos de renta variable internacional por valor de 352 millones de euros, fondos de renta variable europea por valor de 193 millones de euros y fondos de renta variable nacional por valor de 181 millones de euros.
Los reembolsos, que también se han dado, han tenido lugar principalmente en las familias mixtas, renta fija mixta (231 millones de euros) y las de renta fija a largo plazo (77 millones de euros).
Paralelamente, se ha dado un fenómeno bastante poco común en los últimos meses, como es la salida de dinero de los fondos garantizados, estrellas de la inversión colectiva del último año. Los fondos de garantizados de renta variable han sufrido reembolsos valorados en 17 millones de euros y que alcanzan los 243 millones en el caso de los garantizados de renta fija. Estas salidas tienen su razón de ser, pues son muchos los productos de estas familias cuyas garantías han vencido a lo largo de febrero, y muchos partícipes han optado por el reembolso más que por la renovación.
En lo que a rentabilidades se refiere, febrero no ha diferido mucho del mes anterior, ni tampoco del año pasado en su conjunto. Una vez más, los fondos menos agresivos han cosechado las mejores rentabilidades, mientras que las pérdidas se han vuelto a instalar en aquellos que más proporción de su cartera tienen invertida en Bolsa. Tan sólo cuatro familias de fondos han cosechado ganancias medias en febrero: la de los fondos monetarios (0,35%), la de los garantizados de renta fija (0,20%), la de renta fija a corto plazo (0,99%) y la de renta fija a largo plazo (0,29%). A la vista está, no obstante, la exigüidad de estas ganancias.
Peor ha sido, sin embargo, la evolución de los fondos de renta variable. Las mayores pérdidas han correspondido a los productos de renta variable internacional (-4,17%), seguidos muy de cerca por los fondos de renta variable europea (-4,09%). Los productos que invierten en la Bolsa española no han podido evitar los números rojos, si bien sus pérdidas medias, del 2,21%, han sido bastante menores a las del resto de categorías de Bolsa.
El terreno neutral en el que prácticamente se han mantenido los fondos de inversión en el mes de febrero merece la calificación de tregua, frente a lo sucedido en los meses precedentes. Pese a ello, el ejercicio actual mantiene la misma trayectoria que el anterior y, en términos acumulados, el patrimonio ha recibido un severo revés. Los fondos de inversión españoles han registrado un descenso patrimonial bruto (incluida la desvalorización de las carteras), por valor de 1.141,01 millones de euros. De aquéllos, tan sólo 105,80 millones corresponden a reembolsos de los partícipes.