Revista de Prensa
Una buena convención, simplificar las cosas
La convención representa un nuevo planteamiento (...). Para aliñar su interés, los líderes de la UE se refieren a ella en ocasiones como 'convención constitucional' (...). Los sospechosos habituales ya han lanzado numerosas propuestas: integracionistas, federalistas, soberanistas, incluso el puñado de euroescépticos. La UE intentará resolver, una vez más, quién hace qué (...). De un centenar de europeos reunidos en una misma sala cabe esperar un centenar de ideas diferentes sobre lo que es Europa y lo que debería ser. Pero Giscard d'Estaing debe centrar la discusión y simplificarla. El resultado final debe ser, también, sencillo. Más jerga comunitaria o más trapicheos sólo conseguirán desinteresar a la opinión pública.