Israel arrasa varias instalaciones palestinas y causa dos muertos
La 'guerra de represalias' en Oriente Próximo se ha cobrado ya 20 muertos en los últimos 10 días. La aviación israelí arrasó ayer la sede de gobernación y varios organismo de la ANP en la ciudad palestina de Tulkarem (Cisjordania). En el ataque murieron dos policías y resultaron heridos otros 45 palestinos.
Los cazabombarderos F-16 de la fuerza aérea israelí se encargaron así de vengar la muerte de seis israelíes que perecieron el miércoles cuando un extremista palestino irrumpió en una sala de fiestas y comenzó a disparar indiscriminadamente.
El atentado del miércoles tuvo lugar en la localidad israelí de Hedera y fue reivindicado por las Brigadas de Al Aqsa, que se vengaban así de la muerte unos días antes de uno de sus líderes a manos de las fuerzas de seguridad israelíes. A pesar de las declaraciones del ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, de que 'el único camino posible' en Oriente Próximo es el de la paz, la violencia se ha instalado de nuevo en la zona y es cada día más difícil que la espiral cese.
El Gobierno israelí responsabilizó ayer al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, de ser el instigador directo de la matanza de Hedera. Los tanques del ejército israelí cercaron la sede de la ANP en Ramala (Cisjordania), confinando a Arafat en su residencia.
El enfrentamiento entre palestinos e israelíes ha costado ya la vida a más de 800 palestinos y a 245 israelíes desde que la violencia estalló en septiembre de 2000.