El Ibex registra su peor semana desde los atentados contra EE UU
El Ibex cierra su peor semana desde que los atentados del 11 de septiembre llevaran a las principales Bolsas mundiales a los mínimos del año. El índice ha perdido en estas últimas cinco sesiones un 5,67%, tres décimas menos que la tercera semana de septiembre, la misma en que Wall Street reabrió sus puertas tras los ataques terroristas. Aunque las pérdidas no son tan abultadas como en aquella crisis, los principales valores del Ibex, que son también los que poseen mayores intereses en Argentina, han sufrido un severo correctivo.
El Ibex logró ayer avanzar un 0,6%. Pero este repunte fue tan sólo un alto en el camino. El temor a que empeore la situación social y política en Argentina sigue dejándose notar en las decisiones de inversión. Es visible a través la fuerte volatilidad que registró ayer el Ibex y se palpa en los opiniones de los expertos, que no se atreven a predecir un suelo.
La sesión de ayer fue el mejor ejemplo de las dudas que acosan al inversor. Subida en las primeras dos horas de negocio hasta el 1%, caída hasta niveles de apertura a media sesión, nuevo repunte en la apertura de Wall Street hasta superar el 2% y retroceso hasta el cierre, para terminar con un alza del 0,6%, por debajo del 8.000.
Repsol ha subido un 5,47% en las dos últimas jornadas, gracias a que el Gobierno argentino y la petrolera podrían estar negociando fijar el pago de una cuantía fija en vez de establecer un impuesto contra la exportación de hidrocarburos. Asimismo, la petrolera española obtuvo ayer el apoyo de uno de sus principales accionistas, La Caixa, que subió su participación en la empresa del 9,9% al 12,5%.
Aun así, los analistas insisten en que las cosas siguen pintando muy mal en Argentina y aconsejan prudencia. La debilidad política y la crispación social pueden convertir en papel mojado cualquier decisión o acuerdo político. Y el plan de ajuste presentado por el Gobierno de Duhalde ni genera confianza, ni es aprobado por la mayoría de fuerzas sociales y empresariales, que siguen considerándolo inviable.
Las cuatro grandes compañías de la Bolsa española figuran entre los peores valores de la semana. Sin embargo, el grupo Telefónica ha copado las últimas plazas. Así, TPI marcó el mayor retroceso al ceder el 9,65%, seguido de la matriz del grupo, con un retroceso del 8,75%, y de la filial de Móviles (-8,21%). Por su parte, BBVA cayó el 7,73%); Repsol, un 7,01%, y Banco Santander, un 6,34%. En el grupo de los más castigados se han colado Zeltia, que ha caído un 6,97%, y Sogecable (-6,62%).
La sesión de ayer coincidió con la apertura del mercado de cambio en Argentina, cerrado desde el pasado 20 de diciembre. Fue también la vuelta del peso a la libre fluctuación frente al dólar. Y tal y como preveía el mercado la divisa argentina se desplomó hasta 1,7 pesos por dólar, casi un 20% más del tipo de cambio fijado por el Gobierno.
A falta de referencia bursátil, ya que la Bolsa de Buenos Aires permaneció cerrada durante toda la semana, los expertos vieron en la evolución del peso un termómetro del ánimo inversor en la plaza bonaerense.