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El Gobierno cierra el traspaso de la sanidad con una dotación de dos billones

El ministro de Administraciones Públicas, Jesús Posada, cerró ayer el traspaso sanitario de las 10 comunidades que aún faltaban por asumir estas transferencias. Todas ellas, con Gobiernos populares o del PSOE, alcanzaron un acuerdo con Hacienda, por un importe global que ronda los dos billones de pesetas y el traspaso de más de 140.000 profesionales.

José Ignacio Echániz fue ayer el más madrugador de los consejeros de Salud. Echániz firmó junto a Jesús Posada, ministro de Administraciones Públicas, el traspaso de la asistencia sanitaria a las nueve y media de la mañana. La transferencia, que será efectiva el día 1 de enero, ascenderá a 620.000 millones de pesetas, aunque los recursos sanitarios con los que contará este territorio el próximo año superaran los 700.000 millones.

Durante su comparecencia ante los medios de comunicación, el consejero madrileño se refirió al problema de la Fundación Jiménez Díaz: "Nos remangaremos, haremos auditorías de gestión y económicas y haremos radiografías para conocer la situación". No obstante, recordó que en caso de que el Insalud pierda la demanda interpuesta por la Fundación, "como todo parece prever", el Ministerio de Sanidad se hará cargo de la deuda.

El consejero también se refirió a la homologación de los trabajadores del Insalud con los de la comunidad y dijo que "el fondo de desplazados y el impuesto ligado a las gasolinas darán margen para hacer más cosas en el futuro". Sin precisar plazos.

w Extremadura. El vicepresidente de la región, Carlos Sánchez Polo, no ocultó ayer su satisfacción por el acuerdo alcanzado, que supera en más de 500 millones de pesetas la cifra de 151.500 millones barajada en los últimos días. Sánchez Polo se atrevió incluso a bromear sobre el regalo "o la condecoración", dijo, que deberían hacerle sus oponentes políticos, pues la cantidad pactada supera con creces las reclamaciones de estos -136.000 millones de pesetas, el PP; 140.000 Izquierda Unida-. Con los recursos obtenidos, el gasto per cápita en la comunidad pasa de 103.000 pesetas por habitante y año (en 2000) a 143.000 pesetas en 2002. Extremadura, como Castilla-La Mancha, ha cerrado también la liquidación correspondiente al anterior modelo de financiación, que sumará 30.000 millones de pesetas más a los recursos financieros de este territorio. Manuel Amigo, consejero de Economía, no quiso desvelar si en el futuro recurrirá al impuesto sobre las gasolinas para mejorar la prestación sanitaria.

w Murcia. La transferencia en esta región ascenderá a 147.000 millones de pesetas, lo que a juicio del consejero de Sanidad, Francisco Marqués, permitirá a la región "ofrecer una prestación sanitaria superior a la del Insalud". En total, este Gobierno tiene previsto gastar el año próximo 163.000 millones del presupuesto regional. El vicepresidente Antonio Gómez reiteró ayer la negativa de su Gobierno a utilizar el impuesto de la gasolina para aumentar los recursos y señaló que este es el único territorio que no estará obligado a establecer un periodo transitorio para el traspaso "porque ya hicimos los deberes y no necesitaremos de la tutela de la Administración central".

w Castilla y León y Aragón. El Gobierno de Castilla y León cerró el acuerdo a última hora de ayer, por un coste total de 330.000 millones de pesetas, en cuya cantidad están incorporados 5.000 millones de los fondos Feder. Por su parte, Aragón cerró el acuerdo por 164.668 millones, 10.000 millones más que la oferta inicial. A esta partida se debe sumar a los 20.000 millones de presupuesto con lo que ya contaba la Consejería de Sanidad, por lo que el presupuesto final para 2002 ascenderá a casi 185.000 millones.

El Consejo de Ministros aprobará hoy los decretos por los que se formalizan los traspasos sanitarios.

 

Cantabria, última comunidad que se sumó al acuerdo

La comunidad cántabra fue la última que se sumó al acuerdo de transferencias sanitarias. La cifra exacta del traspaso alcanza los 80.000 millones de pesetas y el compromiso del Gobierno central de asumir al 100% el plan director del hospital de Valdecilla.

Por su parte, Asturias asumirá las competencias en materia sanitaria en el año 2002, tras prolongadas y duras negociaciones, que se cerraron en la mañana del 22 de diciembre con un presupuesto de 156.012 millones de pesetas, 3.000 millones menos de lo que pedía el Gobierno regional.

Tras dar por concluida la negociación, el presidente del Principado, el socialista Vicente Álvarez Areces, se mostró satisfecho por el acuerdo alcanzado. Este Gobierno socialista podrá ahora levantar de nuevo el Hospital Central de Asturias, situado en Oviedo, cuyo coste asciende a 21.000 millones de pesetas. Las obras de este hospital, ubicado en el centro de la capital asturiana, han sido durante años foco de disputa entre la Administración central y la autonómica. Mientras el Insalud pretendía remodelar el viejo edificio, como está haciendo con Valdecilla, en Santander, los socialistas asturianos han apostado desde el primer momento por levantar un nuevo hospital, a las afueras del casco urbano.

Por último, y en relación a La Rioja, el PP se mostró ayer satisfecho por el acuerdo alcanzado entre Gobierno regional y el central por un importe superior a 44.000 millones de pesetas. Fuentes del Ejecutivo riojano señalaron que la comunidad conseguirá "un sistema sanitario de primer nivel", con un gasto por habitante de 170.000 pesetas. Sobre los recursos necesarios para poner en pie el nuevo Hospital San Pedro, cuyas obras soportan gran retraso, el PP garantiza que las inversiones tanto en este hospital como en otros centros de salud pendientes están garantizadas con un colchón económico superior a 8.000 millones de pesetas.

 

Baleares, con 102.000 millones, se declara muy insatisfecha

La delegación balear fue la única que ayer mostró abiertamente su insatisfacción por el acuerdo alcanzado, que cifra el traspaso en 102.000 millones de pesetas. La consejera de Sanidad, Aina Salom, no ha logrado una partida de 27.000 millones para financiar las inversiones que necesita la región, además, la renta balear impide al Gobierno del archipiélago acceder a los fondos europeos Feder.

Aina Salom mostró su disgusto asegurando que no es agradable "tener que hacer frente a las inversiones con el dinero que se debería dedicar a gasto corriente", pero Joan Mesquida, consejero de Hacienda, reconoció que con los Presupuestos aprobados hubiese sido una locura quedarse fuera del sistema de financiación". Mesquida afirmó que "la evolución del gasto sanitario será el que obligue, o no, a utilizar el impuesto sobre las gasolinas". Los beneficios obtenidos por esta comunidad tras la firma del acuerdo, que previsiblemente se firmará en la primera quincena de enero, superarán los 14.000 millones.

Castilla-La Mancha

Por su parte, el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, calificó ayer de "extremadamente positivo" el acuerdo de transferencia, por el que Hacienda cederá 231.000 millones para que esta comunidad financie los servicios sanitarios, 16.000 millones más de los ofertados en un principio.

El vicepresidente anunció que las líneas de actuación inmediatas serán descentralizar los servicios sanitarios para que puedan realizarse en el domicilio, como el tratamiento de trastornos mentales, y reducir la lista de espera en 25.000 pacientes en un año. El montante acordado incluye 5.000 millones para financiar infraestructuras, que se pagarán durante el primer quinquenio. La consejera de Economía, María Luisa Araujo, señaló que la comunidad no hará uso del tramo autonómico del impuesto de hidrocarburos para aumentar los recursos. Araujo anunció que el Gobierno central ha pactado con esta comunidad 50.800 millones para liquidar los atrasos pendientes del anterior modelo de financiación.

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