La recaudación por el impuesto de sociedades desciende un 0,6%

Hacienda lleva recaudados de enero a noviembre por el impuesto de sociedades 18.000 millones de pesetas menos que en el mismo periodo de 2000 por la caída de beneficios empresariales y los mayores incentivos fiscales. No obstante, la recuperación del IRPF y del IVA permite al Gobierno asegurar que se alcanzará el equilibrio fiscal a final del año.

La moderación de los beneficios empresariales está provocando en las arcas de Hacienda un descenso en la recaudación por el impuesto de sociedades mayor de lo esperado. La recaudación acumulada, de enero a noviembre, por este impuesto no sólo no ha variado por debajo del incremento nominal de la economía (en torno al 5,5%), sino que, además, ha registrado una caída, del 0,6%, respecto a los ingresos del mismo periodo del ejercicio anterior. De enero a noviembre de este año, Hacienda ha recaudado sólo 2,64 billones de pesetas, 18.000 millones de pesetas menos que en 2000.

El fuerte recorte en la recaudación de sociedades no sólo se debe a la caída de beneficios. Han incidido también, por un lado, los mayores incentivos fiscales a las empresas (sobre todo las de mayor tamaño) por la exteriorización de planes de pensiones y los procesos de internacionalización, y por otro, la comparación de las cifras con el ejercicio pasado, que fue excepcional en recaudación por el impuesto de sociedades.

Si se tiene en cuenta sólo noviembre, Hacienda devolvió en este mes 12.100 millones de pesetas más de los que ingresó por este impuesto. La caída en la recaudación por sociedades, a la que se suma el fuerte descenso de los ingresos derivados de la renta de no residentes (-37%), se compensa con la mejora en la recaudación de otros tributos.

En el caso del IRPF, el incremento de la masa salarial ha permitido que su recaudación se haya incrementado un 11,4% (hasta 5,66 billones de pesetas) en los 11 primeros meses del año. Los ingresos por operaciones interiores en el IVA se han elevado un 29,2% en noviembre, lo que ha permitido mejorar la tasa de crecimiento acumulada en el año hasta el 3,4% (5,53 billones de pesetas).

También se ha recuperado la recaudación por impuestos especiales, que, no obstante, mantiene un exiguo crecimiento, del 3%, que se reduce al 1,4% en el caso del impuesto sobre hidrocarburos. Todo ello ha permitido que el Estado alcance a finales de noviembre un superávit en términos de contabilidad nacional -evalúa los ingresos y los gastos cuando se devengan- de 667.000 millones de pesetas (4.009 millones de euros), equivalente al 0,62% del PIB. El superávit en términos de caja -criterio que mide ingresos y gastos cuando se ejecutan en Tesorería con independencia de cuando se devengan- es menor, de sólo 65.400 millones de pesetas, casi la mitad del excedente de 121.700 millones registrado a finales de noviembre del pasado año.

Tasa radioeléctrica

Los ingresos no financieros crecieron un 5,5%, hasta 19,27 billones, mientras que los pagos lo hicieron al 5,8% (19,21 billones). Estas cifras permitirán que a final del año se alcance el equilibrio presupuestario para todas las Administraciones públicas, según recalcó ayer la secretaria de Estado de Presupuestos, Elvira Rodríguez, en su comparecencia en el Congreso. Hacienda cuenta con que, después de los fuertes pagos a los que se tendrá que hacer frente en diciembre, el Estado acabe 2001 con un déficit cercano al 0,5% del PIB, que será compensado con un superávit de la Seguridad Social similar, a lo que se sumaría el equilibrio fiscal de las comunidades autónomas.

En el capítulo de ingresos, Hacienda espera ingresar todavía 80.000 millones de pesetas del total de la tasa por el uso del espacio radioeléctrico, que aún no han pagado por las empresas telefónicas.

En los gastos, el Estado debe hacer frente en diciembre a un paquete importante de inversiones realizadas por el método alemán de pago al finalizar la obra. Hasta noviembre la ejecución de las inversiones se ha recuperado un poco, pero aún muestra un retraso considerable.

 

La desviación de gastos alcanza 580.000 millones, un 33% más

El Ejecutivo sigue aprobando ampliaciones de gasto sobre las previsiones iniciales, asunto que, por otra parte, ha sido la costumbre de casi todos los Gobiernos.

Las desviaciones de gasto al alza sobre el presupuesto inicial, autorizadas por el Gobierno, alcanzaron hasta octubre los 580.000 millones de pesetas, un 33,3% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Esta subida se debe principalmente a mayores ampliaciones de crédito por valor de 367.900 millones de pesetas (+39,2%).

Del total, 167.200 millones corresponden a mayores gastos financieros para recompra de deuda cara por barata, y otros 249.700 millones de pesetas, a mayores transferencias corrientes. Entre ellas, destacan 31.100 millones adicionales destinados a la liquidación definitiva de las corporaciones locales por su participación en los ingresos del Estado y una ampliación de crédito destinada a la liquidación del fondo de garantía de renta de las comunidades autónomas de1999, por un importe de 101.300 millones de pesetas.

Sin embargo, el juego de las transferencias también gira en sentido contrario. Ello ha permitido que el Estado ingrese en noviembre 331.200 millones de pesetas procedentes, en gran parte, de la Seguridad Social.

Dicha transferencia viene determinada por los mecanismos de financiación de las competencias en materia de sanidad transferidas a las comunidades de régimen foral (Euskadi y Navarra).