'El reto es crear empresas pequeñas que se conviertan en medianas'

Pregunta.

¿Será una presidencia continuista o rupturista?

R. No me gustan las rupturas. Por supuesto, habrá una continuidad en las cosas bien hechas, aunque, como no existen dos personas iguales, la continuidad no significa un comportamiento idéntico al anterioR.

P.¿Y cuáles serán las líneas maestras de su gestión?

R. Yo aspiro a luchar por una estructura de gran desarrollo económico del territorio aragonés, pero no en contra de otras comunidades autónomas, sino siempre a favor del conjunto nacional. Nuestro crecimiento no debe estar basado en que otros decrezcan, sino en una planificación armónica, en la que el liderazgo de Aragón también beneficie al resto de la economía nacional.

P.Pero, para que eso se produzca, Aragón tendrá que empezar por eliminar sus desiertos demográficos.

R. Efectivamente. Pero yo entiendo que se trata de una aspiración viable, porque en esta comunidad existe espacio, agua, energía y los elementos necesarios para el desarrollo. El valle del Ebro puede acoger a un mayor número de habitantes y contribuir al crecimiento económico general, a partir de una mayor participación en el PIB nacional. En la CREA estamos convencidos de que Aragón tiene la obligación histórica de crecer y de hacerlo no en contra de nadie sino a favor del conjunto.

P.¿Qué rasgos caracterizan actualmente el tejido empresarial aragonés?

R. La personalidad aragonesa tiende hacia la libertad individual. Y, en el terreno económico, ese rasgo se ha traducido en que la comunidad se haya convertido en un gran semillero de pequeñas empresas, que son la expresión de otras tantas expectativas personales. Esa capacidad para tener una aventura empresarial propia es una característica aragonesa que se aprecia a primera vista.

P.¿Junto a estos micronegocios, están las multinacionales?

R. Aragón tiene una situación geográfica privilegiada, a pesar de ser un territorio interior, y esto ha actuado como foco de atracción de grandes firmas internacionales, que han contribuido a la modernización del tejido económico.

P.¿Estas abultadas diferencias de tamaño empresarial vuelven a sugerir la clásica desvertebración aragonesa?

R. Pero también constituyen un reto muy interesante. Si se cuenta con alicientes capaces de atraer la instalación de multinacionales y, al mismo tiempo, con la iniciativa suficiente como para provocar un aluvión de microempresas, ahora se debe trabajar para que muchas de estos pequeños negocios generen empresas medianas, con lo que el tejido vendría a equilibrarse. Además, las empresas medias generan una mayor seguridad, al estar, generalmente, más vinculadas al territorio.