El 17% de las empresas no se adaptará a la nueva moneda a tiempo

El 17% de las empresas españolas reconoce que no estarán adaptadas para el euro antes de que acabe el año, según una encuesta divulgada ayer por las Cámaras de Comercio.

No obstante, un 98% de las empresas asegura que estarán preparadas antes de la retirada definitiva de la peseta, el 28 de febrero de 2002. La encuesta revela que, a tres meses de la entrada física del euro, sólo el 42% de las empresas españolas afirmaba estar "totalmente" preparadas para la moneda única.

Un 63% de las empresas consultadas dice tener sus precios expresados en pesetas y en euros y el 72% de los pequeños y medianos empresarios manifiesta disponer de información suficiente para el proceso.

Sin embargo, al igual que en las dos encuestas anteriores realizadas por las Cámaras, el redondeo (35%) y la conversión de precios (26%) siguen siendo las cuestiones que más preocupan a los empresarios. La regla del redondeo consiste en que al realizar la conversión de la peseta al euro, se hará el redondeo por exceso o por defecto al céntimo más próximo: si el tercer decimal que resulta de dividir la cantidad en pesetas entre 166, 386 (las pesetas a las que equivale un euro) es superior o igual a cinco, el segundo decimal debe redondearse al alza, y si es inferior a cinco, el segundo decimal se redondeará a la baja.

Respecto al coste de la adaptación, el 55% de los empresarios lo cifra entre 250.000 y un millón de pesetas. El 45% de los encuestados asegura que la adaptación tendrá un coste inferior a las 250.000 pesetas. Sólo el 19% estima que ese coste estará por encima del millón de pesetas.

Respecto a los precios, el 82% afirma que no aprovechará la entrada física del euro para subir sus precios. Mejora así la tendencia, ya que en la encuesta de abril, el porcentaje de empresas que señalaban que no subirían los precios era del 72%.

Por comunidades, Cantabria es la que tiene más empresas preparadas (55%), y La Rioja (24%), donde hay menos empresas listas.