Los acreedores de Argentina se agrupan para defenderse ante el canje de la deuda
La preocupación de fondo de estos acreedores, como ocurre con la mayoría de los inversores con intereses en Argentina y otros mercados emergentes, está centrada en la falta de garantías.
Los acreedores internacionales de Argentina han comenzado a moverse ante el comienzo del proceso de reestructuración de la deuda pública de ese país.
Hasta hace unos días, un núcleo de fondos de inversión se había quejado de la falta de información y la indefensión en la que se encontraban ante la decisión del Gobierno de Buenos Aires de ofrecer un canje voluntario de títulos de la deuda soberana argentina por otros nuevos, a un tipo de rendimiento inferior.
Pero ayer esos acreedores dieron un paso más y anunciaron la creación de la Asociación de Acreedores de Mercados Emergentes (EMCA, según sus siglas en inglés), para defender sus derechos ante la inminente negociación gubernamental.
La preocupación de fondo de estos acreedores, como ocurre con la mayoría de los inversores con intereses en Argentina y otros mercados emergentes, está centrada en la falta de garantías. El Tesoro estadounidense elogió el jueves el proceso en marcha en Argentina, pero delegó toda la capacidad negociadora en el Fondo Monetario Internacional (FMI). El organismo, por su parte, esquivó su responsabilidad al convocar a un "acuerdo global" entre el país suramericano y sus acreedores. En este sentido, la situación aparece muy confusa, y los analistas y operadores sospechan que una declaración de suspensión de pagos sin atenuantes no está lejos.
Sin embargo, el ministro de Economía argentino, Domingo Cavallo, dijo ayer en declaraciones a The Wall Street Journal que mantendrá el peso atado al dólar o, incluso, al euro. "El peso sólo tiene sentido, sólo seguirá existiendo, si es respaldado por dólares y en una paridad uno a uno. Es más lógico, incluso, decir que sólo usaremos el dólar o sólo usaremos euros u otra moneda creíble", dijo el ministro. En el mismo sentido se pronunció ayer en Lisboa, el presidente Fernando de la Rúa, en visita oficial a la capital portuguesa.
El Gobierno informó ayer el canje de la deuda interna entre el 19 y el 30 de noviembre, tanto para bancos como para particulares.