El Gobierno reactiva la despolitización de las cajas sin el PSOE
El Gobierno ha decidido reactivar la despolitización de las cajas al comunicar al sector, hace algo menos de dos semanas, su intención de introducir en la Ley Financiera, vía enmienda parlamentaria, la limitación al 50% del peso político en los órganos de gobierno de estas entidades. Las cuotas participativas quedan al margen. El PSOE, mientras, ha creado una comisión para abordar el asunto, una vez que el PP no ha vuelto a dirigirse a este partido para llegar a un pacto.
El Gobierno ha vuelto a activar la despolitización de las cajas de ahorros, según han comunicado responsables del Ministerio de Economía al sector hace algo menos de dos semanas.
La intención del Gobierno es introducir, vía enmienda parlamentaria, la necesidad de limitar al 50% la presencia política en los máximos órganos de gobierno de las cajas. Esta enmienda será remitida al Parlamento una vez que la Ley Financiera pase el trámite del Consejo de Ministros, lo que sucederá en breve, ya que será en esta ley donde se incorpore esta medida, tal y como estaba previsto inicialmente. La decisión del Gobierno coincide con el cierre de la comisión de investigación parlamentaria del caso Gescartera.
Esta medida coincide, además, con dos nuevos casos de intervencionismo por parte de los Gobiernos autónomos de Cataluña y Andalucía, según afirman fuentes de las cajas. Así, la Generalitat catalana ha decidido poner en marcha medidas para que las cajas de esta comunidad autónoma se involucren más en proyectos de infraestructuras, justo donde la Generalitat no cuenta con la suficiente financiación pública.
En el caso de Andalucía, la Junta quiere que las cajas capitalicen empresas "que nosotros consideremos sectores estratégicos", según ha declaró el consejero de Empleo y Desarrollo Tecnológico, José Antonio Viera.
El director general de la CECA, Juan Ramón Quintás, ya alertó hace meses sobre las cada vez mayores injerencias políticas en las cajas, que corrían el peligro de convertirse en bancos públicos.
La iniciativa del Gobierno ha sido comunicada a las cajas de ahorros, pero no así al principal grupo político de la oposición, el PSOE, lo que no ha sentado muy bien a los responsables de la política económica de este partido, según reconocen fuentes del entorno del PSOE.
Sin negociaciones
Y es que inicialmente el Gobierno, a través del secretario de Economía, José María Folgado, y el PP iniciaron contactos con el PSOE en materia de cajas, ya que la idea era realizar cualquier cambio en el sector por consenso. Pero desde hace varios meses, el Gobierno no ha vuelto a dirigirse al PSOE para intentar pactar.
El PSOE, sin embargo, ha decidido crear una comisión para elaborar un documento sobre el sector en el que se incluirán cuatro puntos principales: la defensa de la naturaleza jurídica de las cajas, la actualización del destino de los fondos de la obra social, la capitalización del sector (la búsqueda de nuevas fórmulas para reforzar los recursos propios de las cajas, entre las que se encuentran las cuotas participativas) y la despolitización de estas entidades.
Lo lógico es que finalmente PP y PSOE lleguen a un acuerdo para el sector.
Ambos coinciden en la necesidad de despolitizar las cajas, pero difieren en ciertos aspectos de las cuotas participativas (instrumento similar a las acciones pero sin derechos políticos). Tampoco existe un consenso total en este instrumento entre todas las cajas, que temen que si las cuotas cotizan en Bolsa, podría ser un aliciente para que los bancos entrasen en su capital. Otras cajas, sin embargo, consideran que la única forma de evitar la continua politización del sector es a través de la salida a Bolsa de las cuotas, pues sería el verdadero reflejo de la gestión diaria de una entidad y, por lo tanto, la manera de controlar los abusos de los políticos en favor de la gestión de la caja.
El Gobierno aparca, de momento, la regulación de las cuotas para desarrollarlas a través de un real decreto.