Caruana estudia el impacto de la caída de la Bolsa en bancos y cajas
El Banco de España ha comenzado a pedir información a bancos y cajas sobre el efecto que está provocando en sus cuentas de resultados la caída de la Bolsa. El objetivo es comprobar si es necesario un cambio contable en la cartera de renta variable para que las plusvalías latentes compensen las minusvalías, como piden las cajas.
El Banco de España ha decidido estudiar la petición de las entidades financieras, principalmente de las cajas de ahorros, para que las plusvalías latentes existentes en la cartera de inversión ordinaria (en la que se encuentran las participaciones estables que no superan el 3% del capital de una sociedad si ésta cotiza o del 20% si no cotiza) puedan compensar las minusvalías sufridas en esta misma cartera.
Para ello la autoridad supervisora ha empezado a solicitar información a las cajas para comprobar con exactitud el impacto que ha tenido en la cuenta de resultados de estas entidades financieras la negativa evolución de los mercados de renta variable y sobre todo de la Bolsa.
Fuentes del Banco de España admiten su preocupación ante la caída de los mercado y la repercusión que puede tener en la cuenta de resultados de bancos y cajas. Pero las mismas fuentes recuerdan la política de prudencia que siempre ha predominado en el Banco de España, y más en momentos de cambio de ciclo económico, como es el momento actual.
Recuerdan, además, que las medidas que ha ido adoptando la autoridad supervisora han estado encaminadas a preservar la solvencia del sistema financiero español, sobre todo en momentos de cambios económicos.
El gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, ya alertó a las cajas de ahorros en la última asamblea de la CECA, celebrada el pasado mes de abril, de la política seguida por algunas entidades de crecer excesivamente en la concesión de créditos, como en su estrategia de intentar entrar en la gestión de las empresas en las que participan.
Política conservadora
Bancos y cajas son conscientes de la política conservadora y de prudencia del Banco de España. Pero mantienen que la situación económica actual, y sobre todo, la volatilidad de los mercados es coyuntural, razón por la que consideran lógico que el Banco de España acceda a flexibilizar ciertas normativas, igual que lo hizo en 1994, cuando la renta fija sufrió una fuerte movilidad en sus cotizaciones.
La banca, como el resto de las empresas españolas, está sufriendo en los últimos meses el efecto negativo de los mercados, lo que produce una merma en sus cuentas de resultados. Las mayores provisiones por las minusvalías en su cartera ordinaria de renta variable, las fuertes provisiones para insolvencias, consecuencia de la aplicación del fondo de cobertura estadístico para insolvencias (Foncei), son capítulos que irremediablemente tendrán un impacto negativo en las cuentas de resultados de la banca.
Por ello, tanto bancos como cajas llevan meses intentando que el Banco de España suavice las mayores exigencias de provisiones y que mejore el trato contable en la cartera de renta variable. Los bancos también llevan meses intentando que el Banco de España acceda a modificar las dotaciones destinadas al fondo de comercio.
La autoridad supervisora ha descartado flexibilizar las exigencias del Foncei este trimestre, aunque volverá a analizar su efecto en la cuenta de resultados en enero. Sobre las otras dos solicitudes, las perspectivas de que salgan adelante se vuelven cada vez más complicadas, según reconocen fuentes financieras.
Pagos transfronterizos mejor regulados
Las transferencias en euros dentro de países de la Unión Europea estarán mejor reguladas a partir del 29 de octubre, cuando entra en vigor la circular 3/2001 del Banco de España, que recoge recomendaciones de la UE y modifica otra anterior sobre transparencia en las operaciones y protección de la clientela.
La circular prohíbe a las entidades financieras cobrar doble comisión por los pagos transfronterizos. No podrán cobrar al beneficiario el coste de la transferencia, que se cursará como máximo al día siguiente de la orden.
Los pagos se harán más ágiles, ya que se crearán dos códigos específicos para estas operaciones: la identificación bancaria y un número internacional de cuenta para el cliente, según explicó ayer Emilio José Ruiz, letrado del Banco de España, durante el VI Foro de Finanzas, Tesorería y E-business.
Otra de las novedades de la circular es que da respaldo jurídico al uso de Internet como herramienta de comunicación de las entidades con sus clientes. æpermil;stos podrán pedir un precontrato electrónico con tarifas y condiciones, que tendrá cinco días de validez.
Además, el Banco de España exigirá a las entidades la relación de comisiones por transferencias, que la institución incluirá en su web (www.bde.es) a partir de abril de 2002.