La inflación británica bajó cuatro décimas en septiembre, hasta el 1,7%
La inflación bajó en el Reino Unido en septiembre un 0,4%, hasta el 1,7%, confirmó ayer Oficina Nacional de Estadística (ONS).
La ONS anunció también que la inflación subyacente -que excluye los préstamos hipotecarios- también retrocedió un 0,3% y se situó en el 2,3%. Según los datos de la Oficina Nacional de Estadística, la caída del nivel de los precios se debió, entre otras causas, a la bajada de los precios de la gasolina.
Sin embargo, el precio del textil, los alimentos de temporada y las vacaciones en el extranjero subieron, aunque menos que durante el mismo periodo del año anterior.
La inflación subyacente, que se utiliza para fijar la política monetaria del país, está todavía por debajo del umbral máximo del 2,5% establecido por el Gobierno británico como referencia para los tipos de interés. El portavoz de Economía del Partido Liberal Demócrata dijo que la inflación está "muy baja, mientras la industria está en recesión y otros sectores corren el mismo riesgo".