Las medidas de seguridad provocan retrasos en los vuelos a EE UU
Los pasajeros que viajan a Estados Unidos están sujetos a mayores controles y a unas medidas de seguridad extremas, pese a que las compañías aéreas tratan de minimizar estos efectos manteniendo los tiempos de presentación en el aeropuerto casi igual a los que se exigían antes del 11 de septiembre. Todo ello provoca retrasos en los vuelos con destino a Estados Unidos, Israel y algunos países de América Latina.
Los pasajeros que vuelen a Estados Unidos, Israel, México, San Juan de Puerto Rico, San José de Costa Rica o Santo Domingo deben armarse de paciencia y extremar las precauciones para no incluir en su equipaje de mano ningún objeto punzante o cortante (lima de uñas metálica, tijeras, cuchillos, etc.). Tampoco podrán pasar al avión más de un bulto y los que viajen en clases preferentes se encontrarán con una cubertería de plástico igual a la que utilizan los pasajeros de clase turista (los cuchillos metálicos están prohibidos). Son sólo algunas de las medidas de seguridad que se han puesto en marcha tras los atentados del 11 de septiembre y que están provocando retrasos "ocasionales" en la salida de los vuelos.
No obstante, las compañías aéreas intentan minimizar la situación y "mantienen" los tiempos estándar de presentación en el aeropuerto, aunque Iberia "recomienda a los pasajeros adelantarlos en la medida de lo posible". Continental Airlines exige que el viajero se persone dos horas antes de la salida. El mismo procedimiento siguen Delta y Lufthansa, que han adelantado el tiempo de presentación en media hora y se muestran más estrictos en el número de bultos que permiten llevar a bordo, incluidos quienes viajen en gran clase.
El bombardeo estadounidense a Afganistán no ha hecho sino reconfirmar todas estas medidas que aeropuertos y compañías pusieron en marcha hace casi un mes.
Las medidas solicitadas por las autoridades americanas para los vuelos con destino a EE UU son la inspección manual aleatoria del equipaje de bodega en la facturación de los vuelos, la inspección del 100% del equipaje con un detector de explosivos, el control visual del equipaje de mano y aleatorio con detectores de metal en el embarque, y la inspección visual del personal que trabaja en los aviones.
Tanto desde Aena como desde las compañías aéreas se asegura que el ataque a Afganistán no ha modificado las medidas de seguridad que ya están operativas desde el atentado a las Torres Gemelas y al Pentágono, y que los retrasos que se están sufriendo son "ocasionales".
Incomodidad para el pasaje
Lo que sí reconocen es la serie de incomodidades que están sufriendo los pasajeros que viajan a EE UU, así como la demora que ocasionan los controles continuos a los que se somete tanto al equipaje como al viajero. "Seguridad y comodidad son incompatibles en estos casos", aseguran fuentes del sector.
Según el documento que Iberia ha remitido a las agencias de viaje, los "pasajeros en tránsito en EE UU o San Juan [Puerto Rico] hacia terceros países tienen que recoger su equipaje en la escala de tránsito y pasar los preceptivos controles de inmigración y aduana". Además añade que "estas medidas podrán sufrir variaciones con el paso de los días".
Air France emitió ayer un comunicado en el que asegura que, "más allá de los dispositivos de seguridad en vigor, continúa trabajando con las autoridades y los constructores [de aviones] con el fin de desarrollar nuevos procesos que ofrezcan los más altos estándares en materia de seguridad".