Senaf se enfrenta a la dura competencia de las plataformas de negociación extranjeras
Senaf es la única plataforma existente en España donde el Tesoro reconoce la negociación de deuda pública española. Pero su hegemonía puede verse amenazada si el Gobierno da el visto bueno a la entrada de grupos extranjeros que compitan con Senaf en el mismo territorio. La plataforma líder de negociación de deuda pública en Europa, MTS, lleva varios meses intentando conseguir la aprobación de las autoridades españolas. No todos le dan la bienvenida.
Hasta hace muy poco, tras una emisión de bonos por parte del Tesoro de cada país, la deuda pública se negociaba en un mercado secundario en el que las operaciones se casaban a través del teléfono (over the counter, OTC). Esta forma de operar limitaba el número de transacciones y hacía muy difícil la fijación de precios.
La llegada de plataformas electrónicas aumentó la trans-parencia y multiplicó las oportunidades de negocio. Se trata, en el fondo, de la creación de un mercado secundario eficiente y estandarizado. La clave del éxito está en la liquidez: las más líquidas atraen al mayor número de participantes, y viceversa.
Senaf es desde junio de 1999 la única plataforma existente en España donde puede negociarse de forma reconocida [por el Tesoro] la deuda pública emitida por el Gobierno español. Su estatus jurídico es el de una agencia de valores con la categoría de sistema organizado de negociación (SON). Esta categoría -la misma que tiene, por ejemplo, el Latibex- le permite actuar como un mercado secundario oficial.
Pero su posición de privilegio puede peligrar si otras plataformas que ya operan con éxito en el extranjero consiguen en España la misma categoría que tiene Senaf. Es el caso de MTS, un grupo presente en siete países europeos y que concentra entre el 40% y el 50% del volumen del total de deuda soberana europea.
Decisión del Gobierno
MTS lleva más de cinco meses intentando conseguir en España el estatus de agencia de valores y la categoría de SON. Algo que no parece gustar a algunos. Fuentes del mercado señalaron que, a pesar de existir el derecho a la libre competencia, la decisión de admitir una nueva plataforma corresponde al Gobierno y es, por tanto, "discrecional".
Según las mismas fuentes, la presencia de una nueva plataforma en España fragmentaría el mercado en dos, lo que iría en contra de la liquidez de la deuda española.
La última razón gira sobre el control de los libros de órde-nes, que, según estas fuentes, "es esencial que esté domina-do por instituciones españolas". Javier Tordable, director ejecutivo de lo que será MTS España en caso de ser aproba-do, sostiene que la entrada de MTS "no dividiría la liquidez, sino que ésta se adheriría a un contexto europeo". "Cree-mos, además, que la competencia sigue siendo el OTC, por lo que, si promovemos una plataforma eficiente, estamos generando y no restando liquidez", añade Tordable.
Respecto al control del li-bro de órdenes, Tordable reco-noce que su motor de casación se encuentra en Milán, pero argumenta que el acceso por parte del Tesoro está garantizado "mediante un contrato detallado" que no resta a Tesoro ninguna capacidad reguladora. "La tendencia es la concentración de los mercados internacionales sin que importe dónde está el ordenador que casa las operaciones", concluye Tordable.
Concentración del negocio
Senaf mueve aproximadamente el 50% del volumen del mercado secundario de deuda española. El resto se lo repar-ten las OTC o bien otras plata-formas, como MTS o BrokerTec. ¿Por qué concentra Senaf la mayor parte de la liquidez si es posible negociar a través de otras plataformas?
Hasta ahora, los creadores de mercado de deuda pública reconocidos por el Tesoro de-ben cumplir sus obligaciones a través de Senaf. La figura del creador de mercado ofrece ventajas, como mayor tiempo en la participación de las subastas, entre otras. Pero también tiene obligaciones, como un mínimo de peticiones en cada subasta y garantizar la liquidez con niveles determinados de volumen.
Es decir, si una entidad aspira a tener los derechos y las obligaciones de un creador de mercado en España, no tiene otra alternativa que ser miembro de Senaf, que se lleva- la mayor parte del volumen de negocio/liquidez.
No obstante, el Tesoro, en sus criterios para evaluar a los creadores de mercado, deja la puerta abierta al reconocimiento de operaciones realizadas en "cualquier otra plataforma local de negociación electrónica que la Dirección General del Tesoro y Política Financiera determine". El Tesoro es incluso más claro en su memoria de 2000: "La normativa española contempla la posibilidad de admitir nuevas plataformas locales de negociación de deuda pública que, además, podrían estar interconectadas con otras plataformas europeas de negociación.
Parece que el mercado español de renta fija vivirá, en breve, el nacimiento de MTS España, sistema local, abierto e interactivo de negociación similar a la plataforma que está en funciona-miento en buena parte de los mercados soberanos europeos".
Posiciones encontradas entre los bancos
La simple mención de la posible entrada en España del grupo MTS, que tiene entre sus consejeros al mismísimo Alexandre Lamfalussy, guru de la integración de los mercados europeos, provoca cierta incomodidad. La mayor parte de los miembros de Senaf consultados por este diario prefirieron no hacer ningún comentario.
No obstante, algunos de ellos sí se mostraron abiertos a la posibilidad de ser miembros de MTS España. Fuentes de Société Générale señalaron que se unirán a ellos y que no dudan de que otros bancos extranjeros sigan su ejemplo. También respondieron afirmativamente desde Deutsche Bank. Desde esta última firma incluso se mencionó la existencia de una carta de intenciones con la futura MTS España firmada por 15 entidades financieras de primera categoría, tanto locales como internacionales. Ambas, no obstante, señalaron que su participación en esta plataforma no supondría su salida de Senaf.
Por su lado, Rafael Bunzl, director general del grupo CIMD, una de las firmas que impulsaron la creación de Senaf, aseguró que la llegada de MTS a España dividiría la liquidez del mercado. "No nos planteamos ser miembros de MTS España, entre otras cosas porque no admiten a entidades que, como nosotros, sólo son intermediarias", concluyó Bunzl.