Gobierno y empresas turísticas crean una comisión de vigilancia
La Secretaría de Estado de Comercio y Turismo, junto con las principales empresas del turismo crearán un grupo de trabajo que analizará semanalmente el estado del mercado turístico y la forma en la que le está afectando la crisis mundial.
En el grupo de trabajo estarán representadas las comunidades autónomas, los ayuntamientos, las agencias de viajes, los grupos hoteleros, las compañías de aviación y la Administración central, que contará con dos representantes.
Además de hacer un seguimiento semanal de la evolución del sector en relación con los atentados del pasado 11 de septiembre en EE UU, el grupo de trabajo también analizará la situación de los mercados emisores de turistas hacia España y de otros países competidores.
La Secretaría de Estado de Comercio y Turismo, a cuyo frente se encuentra Juan Costa, pretende que el grupo de trabajo sirva para conocer lo antes posible la evolución del mercado y adoptar rápidamente las medidas necesarias para hacer frente a los acontecimientos que puedan afectar a la actividad turística.
Costa, que se reunió ayer además de con el Consejo Promotor de Turismo con los responsables de las cadenas hoteleras y con los de las tres principales aerolíneas españolas, indicó que la crisis generada por los atentados terroristas de EE UU ha afectado "significativamente" al flujo de turistas de esa nacionalidad en dirección a España.
Además de este efecto, la incidencia en España de esa crisis se está dejando sentir en las aerolíneas.
De hecho, Spanair, a través de su subdirector general, Eduardo Aranda, aseguró ayer que la compañía se vería obligada a aumentar el precio de los billetes si el Gobierno y la Comisión Europea no ponen en marcha medidas para suavizar los efectos de la crisis.
En un sentido similar se manifestó ayer el presidente de la Asociación Española de Compañías Aéreas (AECA), Felipe Navío, quien solicitó al Gobierno un paquete de ayudas que apuntalen la situación de las compañías, "teniendo en cuenta que la situación actual es excepcional".
Las aerolíneas recibieron el lunes pasado el compromiso del Gobierno para garantizar, a través del Consorcio de Compensación de Seguros, el aumento del seguro de guerra y terrorismo. Pese a ello, el consorcio estableció una prima de entre 45 y 90 pesetas por cada billete. Las compañías aéreas han decidido asumir "inicialmente" ese coste, aunque aún están en el proceso de debate con la Administración para que esa decisión sea definitiva.
En una primera estimación las aerolíneas de AECA consideran que esas primas supondrán entre 75 y 151 millones de pesetas al mes.
Los efectos de la crisis continúan dejándose sentir en las compañías aéreas de todo el mundo. Así, SAS ha obtenido una garantía de seguro por parte del Gobierno sueco que suma 317.730 millones de pesetas (1.909 millones de euros) durante un mes.
Entre las aerolíneas que aumentarán sus precios se encuentran las de Taiwan, que han decidido esa subida para afrontar la subida aplicada por las aseguradoras a las pólizas.
El Gobierno de ese país ha indicado que está estudiando aportar ayudas financieras a las aerolíneas.
Mientras las compañías chinas Cathay Pacific y su filial Dragonair han suscrito un contrato con una empresa privada para que les asegure contra los riesgos de ataques terroristas y de guerra. Ninguna de las dos empresas ha desvelado el nombre de la aseguradora, aunque sí han desvelado que es una compañía estadounidense y sin experiencia en el negocio aéreo.
Por su parte, compañías aéreas como Singapore Airlines han anunciado que dejarán- de volar a Pakistán "como medida de precaución".