Rato asegura que "en este momento" no se plantea dimitir
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, declaró ayer que "en este momento" no se plantea presentar su dimisión. Rato, a quien desde los partidos de la oposición se señala como responsable directo del nombramiento de la ya dimitida Pilar Valiente al frente de la CNMV, explicó que "cuando uno tiene un puesto de responsabilidad es responsable de aquello que depende de sus decisiones". En opinión del ministro ¿que participó ayer en la presentación del "Diccionario de Nueva Economía", del periodista Joaquín Estefanía¿, será la comisión parlamentaria que investiga en el Congreso el "caso Gescartera" la que debe depurar "responsabilidades políticas".
Todas las miradas estaban ayer puestas en la reacción del vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, tras la salida de Pilar Valiente de la presidencia de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) por su posible implicación en el caso Gescartera. Lejos de aportar una respuesta clara y contundente cuando fue preguntado por su posible dimisión, el ministro dejó abierta la puerta a la incertidumbre al responder con un escueto "pues no, no en este momento". Y aclaró que ésta es una petición que viene de la oposición, pero no de su partido.
El vicepresidente, que realizó estas declaraciones antes de participar en la presentación del Diccionario de la Nueva Economía, del periodista Joaquín Estefanía, reconoció estar tocado por el caso Gescartera y explicó en lenguaje laberíntico: "Cuando uno tiene un puesto de responsabilidad, es responsable de aquello que depende de sus decisiones y que puede afectar al funcionamiento de instituciones que dependen de su responsabilidad". Y añadió que corresponde al Congreso, en concreto a la comisión encargada de investigar el caso, determinar la existencia de responsabilidades políticas.
En la presentación del libro, Rato compartió mesa con el que fuera ministro de Economía con el PSOE Carlos Solchaga, quien tuvo ocasión de recordar las circunstancias que le llevaron a, según sus palabras, "quitarse de en medio" cuando, como portavoz parlamentario del Grupo Socialista, salió a la luz el caso Ibercorp, en el que se vio implicado el entonces gobernador del Banco de España, Mariano Rubio.
Tras las preguntas de una periodista por las similitudes del caso Gescartera con Ibercorp y las posibilidades de que sucesos como éstos afecten a los mercados, en la sala se hizo un frío silencio que fue roto por Rato. æpermil;ste, dirigiéndose a Solchaga, dijo: "Da la receta tú si quieres". Y Solchaga la dio.
Tras analizar la situación de incertidumbre de los mercados por los recientes sucesos ocurridos en EE UU, Solchaga, además de marcar las diferencias del caso Ibercorp con Gescartera, manifestó que "un alto cargo debe tener responsabilidad política por las actuaciones de sus subordinados cuando no ha tenido la suficiente diligencia en vigilar su actuación o cuando, conociéndose un escándalo, no se corrige".
No obstante, reconoció la dificultad de fijar responsabilidades y aclaró que el hecho de que él decidiera dimitir no tiene por qué ser un precedente.
Eficacia y transparencia
Por su parte, el actual ministro de Economía descartó que una estafa, como así calificó el caso Gescartera, "pueda afectar al mercado". Y añadió que "puede haber consecuencias personales por determinadas actuaciones, pero ni el mercado, ni la CNMV han dejado de ser eficaces y transparentes".
El ministro de Economía concluyó su intervención con una frase que pareció poco improvisada: "Querer elevar a una pira a las instituciones por la actuación de una pequeña firma española que ha estafado no es justo".
Carlos Solchaga añadió que se ha dado una coincidencia familiar [el anterior secretario de Estado de Hacienda presentó su dimisión tras conocerse que su hermana era la presidenta, hoy en prisión, de Gescartera], que no es significativo el daño causado y que más del 60% de los afectados recuperará su inversión.
El ministro da un mensaje de calma a los inversores
El ministro de Economía declaró ayer que "durante el segundo y tercer trimestre tocarán fondo las economías más fuertes". Y para ver lo que pasa en el futuro más inmediato, Rato centró la cuestión en la respuesta que EE UU pueda dar a los ataques terroristas sufridos en Nueva York la semana pasada. Según el titular de Economía, esta reacción "puede retrasar la recuperación de la economía de este país".
Rato, que rechazó que el escenario económico actual sea de recesión generalizada, reconoció la existencia de un entorno de incertidumbre que afecta al consumo y la inversión. Sin embargo, lanzó un mensaje de tranquilidad a los inversores, a los que indirectamente animó a inyectar dinero al decir que ahora contamos con "unos mercados con precios atractivos". Rato respondía así a los planteamientos que antes había expuesto el que fuera ministro de economía con el PSOE, Carlos Solchaga.
Para Solchaga, lo más importante en estos momentos es "proporcionar liquidez inmediata al mercado". Y apuntó que, aunque se ofrezcan valores con un PER (índice que refleja la relación entre el precio y beneficio de una acción) atractivo, será difícil que los inversores se animen a entrar por el ambiente general de incertidumbre, algo que, por otro lado, también es de esperar que frene las ventas precipitadas de valores. Tanto Rato como Solchaga, al hilo de la presentación del Diccionario de la Nueva Economía, tuvieron ocasión de manifestarse sobre la viabilidad de la tasa Tobin (aplicar un impuesto a los movimientos especulativos de capital). En este sentido, Rato afirmó que, si ya es difícil lograr acuerdos en la UE sobre la forma de gravar las rentas de capital de los no residentes, "debatir la tasa Tobin vie-ne a ser no querer resolver el problema". Para Solchaga se trata de algo que, salvo que sea global, "no sirve de nada".
Lucas envía muestras de
"solidaridad" al área económica del Gobierno
La situación del vicepresidente segundo, Rodrigo Rato, y del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, es calificada en privado de "delicada" por otros miembros del Ejecutivo y dirigentes del PP, conscientes de que la dimisión de la presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Pilar Valiente, en estos momentos de la investigación judicial y parlamentaria del caso Gescartera no entraba dentro de los planes de Rato.
Destacados miembros del Gabinete no han dudado en salir en defensa del vicepresidente segundo y también de Montoro, aunque en unos términos que en el área económica del Ejecutivo no han sido bien recibidos. Los titulares de Fomento y Exteriores, Francisco Álvarez Cascos y Josep Piqué, pusieron el miércoles su grano de arena al considerar públicamente que ni Rato ni el ministro de Hacienda deben dimitir por el caso Gescartera.
Muestras de solidaridad
Ayer le tocó el turno al ministro de la Presidencia, Juan José Lucas, quien aseguró en los pasillos del Congreso que la "solidaridad", la "identidad" y el "apoyo" de dipu-tados, miembros del Gobierno y de toda la organización política con el equipo económico son "absolutos".
El ministro de la Presidencia añadió que la dimisión de Pilar Valiente al frente de la CNMV "es una decisión personal", en la que sólo ella puede saber los "juicios y motivos". Aprovechó también para descalificar las críticas que Rato ha recibido de la oposición a raíz del respaldo que ha ofrecido en todo momento a Valiente.
"La oposición apunta a donde puede. Da puñetazos al aire con mucha frecuencia y es sólo por ver si se encuentra con algún objetivo", abundó.