_
_
_
_

La apertura alcista de las Bolsas de EEUU tranquiliza los mercados

Poco a poco, la calma regresa a los mercados del mundo, pero con dificultades. El temor a que los atentados contra Estados Unidos tengan graves repercusiones sobre el crecimiento económico se dejó sentir ayer entre los operadores. Los dos indicadores principales del parqué estadounidense, el Dow Jones y el Nasdaq, sintieron de nuevo los efectos del nerviosismo y finalizaron con pérdidas, después de haber permanecido en terreno de ganancias casi toda la sesión. Las Bolsas europeas no fueron ajenas a la inquietud y finalizaron la jornada en números rojos, aunque con descensos limitados por el buen comportamiento de Wall Street en su apertura.

Los inversores estadounidenses tomaron nota ayer de los llamamientos a la calma de los responsables económicos y financieros. Una calma, eso sí, tensa, después de las fuertes pérdidas de la víspera y de un futuro inmediato que se antoja incierto.

Las primeras horas de la sesión hacían pensar que las alzas serían la tónica en Wall Street. Los principales indicadores se mantenían sin dificultades en zona de ganancias, que superaron el 1% en algunos momentos. Sin embargo, conforme se acercaba el cierre, los recelos se apoderaron de los operadores y dominaron las ventas. El Dow Jones se dejó el 0,19% y el Nasdaq, un 1,55%.

Una muestra de que la normalidad aún dista mucho de regresar fue el anuncio de bomba en el mercado de metales y productos energéticos de Nueva York (Nymex), lo que obligó a su evacuación.

Como telón de fondo, la tensión creciente por la más que posible respuesta militar de Estados Unidos a los atentados terroristas y los temores a que la situación de incertidumbre tras los ataques desemboque en recesión. Aun evitando este extremo, la posibilidad de una rápida recuperación de la economía parece ahora más lejana. La desaceleración del consumo de las familias y el frenazo de la inversión empresarial son los principales temores que recogen los informes de coyuntura tras el atentado.

Suben las distribuidoras

En este ambiente, los inversores apostaron, sobre todo, por las líneas aéreas y distribuidoras, sectores duramente castigados en la sesión anterior. Wal Mart recuperó posiciones tras caer en la jornada previa el 4,8%. El informe semanal de ventas al por menor mostró un aumento del 2,2%, al tiempo que los estadounidenses se lanzaban a comprar alimentos, bebidas y banderas tras el ataque.

Los operadores, asimismo, volvieron la vista hacia algunas tecnológicas de peso. El anuncio de Oracle, que confirmó las expectativas de crecimiento para el ejercicio, insufló ánimos entre los compradores del sector. Valores como Microsoft y Qualcomm se anotaron notables subidas, aunque insuficientes para compensar las caídas de Cisco, Peoplesoft o Dell. Mientras, Immunex ganó un 5,56%, después de ser incluida en el S&P 500, en sustitución de Tosco, que fue adquirida por Phillips Petroleum.

En el lado de las pérdidas se situaron las compañías de servicios financieros. American Express fue responsable en parte de los descensos, al anunciar, igual que hiciera Citigroup, que los atentados tendrán impacto en su cuenta de resultados. El valor retrocedió un 9,12%.

A pesar de la tranquilidad, los expertos se mantenían cautos. Incertidumbre e inestabilidad eran algunos de los términos más pronunciados durante la sesión, en referencia a lo que puede suceder en las próximas semanas. En este sentido, Salomon Smith Barney redujo el objetivo para final de año para el S&P 500 desde 1.400 hasta 1.200 puntos y para el año 2002 desde 1.500 hasta 1.350. El índice cerró ayer en 1.032,74 puntos.

 

Los sectores más penalizados se recuperan parcialmente

Los bajos precios alcanzados por las compañías aéreas, tras el desplome de la víspera, atrajo ayer a los operadores estadounidenses, si bien las subidas no fueron suficientes para compensar el desplome sufrido la víspera. Delta Airlines y AMR, algunos de los valores más castigados en la sesión del lunes, lograron recuperar ayer parte de terreno perdido. Después de anunciar drásticos planes de reestructuración, que incluyen despidos masivos de empleados, el índice S&P sectorial encabezó los ascensos, con un subida cercana al 6%.

Delta se anotó un ascenso del 11,3% y la matriz de American Airlines, a la que pertenecían dos de los aviones secuestrados, se anotó un 10,8%. Otro ascensos significativo dentro el sector fue los el registrados por US Airways, el 4,5%. æpermil;sta fue la penúltima empresa en anunciar el despido de 11.000 trabajadores y la reducción en un 23% de los vuelos previstos.

Pese a los ascensos de ayer, el saldo de los dos últimos días es negativo. El índice S&P de este grupo ha retrocedido en dos sesiones un 30% y encabeza las pérdidas.

Además, las dudas se ciernen sobre el sector para los próximos meses. Según las previsiones de los analistas, la posible aceleración del enfriamiento de la economía reducirá drásticamente el tráfico aéreo, lo que se dejará sentir en las cuentas de resultados. Además, opinan los más pesimistas, el aumento de las medidas de seguridad supondrá un mayor coste para estas empresas.

Por su parte, las compañías aseguradoras continuaron acumulando descensos, especialmente aquellas directamente relacionadas con el suceso del pasado martes.

En el polo opuesto, las empresas relacionadas con el sector de defensa se mantuvieron firmemente en terreno de ganancias. En dos sesiones, este sector ha sido uno de los que mejor se ha comportado.

 

Merrill Lynch pronostica un retraso en la recuperación económica

Cristina de la Sota

Merrill Lynch Investment Managers considera que el crecimiento económico mundial se retrasará "como mínimo" un trimestre como consecuencia de los atentados terroristas perpetrados contra Estados Unidos el pasado 11 de septiembre. La recuperación, por tanto, no comenzará hasta el segundo trimestre de 2002.

El economista jefe de la gestora, Richard Turnill, matizó que el potencial de rebote será mayor cuando mejoren las perspectivas de beneficios empresariales. Recordó, sin embargo, que este trimestre ya se consideraba "delicado" en cuanto a resultados empresariales, por lo que calificó la situación actual de "menos transparente y de mayor incertidumbre".

Turnill subrayó, además, que, debido a los últimos acontecimientos, se ha producido un importante aumento de liquidez y una mejora de las valoraciones de las compañías como consecuencia del aumento de la prima de riesgo. Estos factores, según él, no impiden que las perspectivas de crecimiento sigan siendo peores de lo esperado. "En el último año el aumento de liquidez no ha aumentado la inversión".

En cuanto a los mercados emergentes, señaló que su dependencia del crecimiento de EE UU tendrá un impacto negativo para estas regiones.

Los últimos acontecimientos han llevado a la gestora a revisar sus recomendaciones hacia sectores más defensivos, mientras reducen el peso de los industriales y aumentan la valoración del sector salud.

La gestora, por otra parte, ha desarrollado una nueva herramienta de trabajo, el Global Sector Analysis, que permite identificar en cada momento del ciclo económico aquellos sectores con mejores perspectivas.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_