La producción industrial cae por sexto mes consecutivo
La producción industrial sigue bajo mínimos. En julio se cumplieron, además, los peores presagios económicos, aquellos que técnicamente anuncian recesión: la tasa de variación anual no sólo registró por sexto mes consecutivo valores negativos, sino que la caída del índice es la más pronunciada del semestre, al situarse en julio un 3,7% por debajo del mismo mes de 2000, una vez corregidos los efectos del calendario.
Los primeros síntomas de agotamiento se detectaron en febrero, cuando se contabilizó un descenso del 1,6%, pero en junio el registro del -0,8% suavizó las peores expectativas. Después de que la producción industrial registrara tasas positivas durante todo el año 2000, la serie histórica anuncia que sólo la media anual de 1993 fue peor que la registrada a principios del verano, con un descenso de la producción entonces del 4,7%
En julio, la pérdida fue generalizada y afectó a todos los bienes económicos, especialmente a los bienes de equipo, que registraron una variación anual negativa del 6,1% y que después de una leve recuperación del índice en abril (2,5%) llevaban tres meses augurando estancamiento económico.
La caída de la producción de bienes de consumo también fue especialmente intensa en julio, como anunciaban las tasas de los meses anteriores, con un porcentaje negativo del 4,9%.
Bienes intermedios, que en junio registró una leve mejoría del 0,1%, cerró julio con un descenso del 1,9%.
Valores superiores
Con estas variaciones, la tasa interanual de lo que va de año 2001 se sitúa, corregidos los efectos del calendario, en un -1,4% para el índice general, en un -2% para los bienes de consumo, en un -1,6% para los bienes de equipo y en un -0,9% para los bienes intermedios.
Pese a este descenso generalizado de la producción industrial, hay actividades que registraron en julio valores superiores al 8% en tasa anual. Este es el caso de algunos materiales de transporte y manufacturas.
Los mayores descensos se produjeron en madera y muebles, -18,2%; en equipos informáticos, -9,6%; combustibles sólidos, -8,2%; material electrónico, -8,15%, e instrumentos de precisión, -7,4%.
El Ministerio de Economía hizo pública ayer una nota oficial en la que destaca que las caídas más intensas de la producción industrial se concentraron en la "industria de la madera, el corcho y muebles de madera" y en la "construcción de máquinas de oficinas y ordenadores".
El comunicado oficial hace hincapié en que las tasas de variación negativas de la producción están en consonancia con la fase de desaceleración de la demanda interna y de la desaceleración que están registrando las exportaciones, consecuencia a su vez del debilitamiento de la economía mundial en general, y de la actividad en la Unión Europea, en particular.
A pesar del mal dato que ha protagonizado este indicador durante el mes de julio, el departamento que dirige Rodrigo Rato confía en que se podría apuntar hacia una flexión al alza en la segunda parte del año, particularmente si se confirma la recuperación de la economía estadounidense y mejora el contexto internacional.
No obstante, después de los últimos acontecimientos ocurridos en Estados Unidos, los analistas se encuentran divididos sobre las posibles repercusiones que podrían tener sobre la actividad económica mundial.
El ministro Rato se apresuró ayer a confirmar que la economía española se encuentra en un momento de solidez que no parece presagiar ningún cambio brusco en los actuales indicadores macroeconómicos.
El Gobierno confía en que el momento más delicado de la desaceleración económica se produzca en el último trimestre de este año, para que a partir del primer trimestre de 2002 se inicie una suave recuperación.