El Estado compensará con 121.000 millones a las regiones por el IRPF
La última reforma del IRPF, aprobada en 1999, obligará al Estado a compensar con 121.000 millones de pesetas a las comunidades autónomas. Este el coste de la garantía aprobada un año antes por los Gobiernos autonómicos, tras detectar una caída en los ingresos provenientes del IRPF. El coste para el Estado ha sido de 446.000 millones.
El Estado tendrá que compensar con 121.000 millones de pesetas a las comunidades autónomas por la caída en 1999 de los recursos regionales derivados de la tarifa autonómica del IRPF y de la participación territorializada en dicho impuesto.
Esta compensación, resultado de aplicar las garantías (PIB nominal, como suelo) que el Consejo de Política Fiscal y Financiera aprobó el 27 de marzo de 1998 para evitar una merma sustancial de los ingresos tras detectar una evolución negativa del impuesto sobre la renta, es el coste efectivo que la reforma fiscal del PP ha tenido para el Estado en lo que atañe a la financiación autonómica. El coste para el Estado en exclusiva asciende a 446.000 millones de pesetas, según se desprende de la comparación entre la cuota estatal 1999 (4,2 billones de pesetas) y la correspondiente a 1998 (4,7 billones).
Los 121.000 millones, de los que el Estado sólo tendrá que liquidar 72.879 millones por los anticipos de tesorería conseguidos, no incluyen el dinero que Hacienda tendrá que pagar a las tres comunidades autónomas -Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha- que no aceptaron el modelo 1997-2001, cuya liquidación anual se hará siguiendo los criterios del sistema de financiación vigente, según explicó el lunes en el Senado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Según la información facilitada por la Dirección General de Fondos Comunitarios y Financiación Territorial, el Estado tendrá que compensar a todas las comunidades autónomas por la caída del IRPF, con la excepción de Madrid, que recauda más dinero de lo que valen sus competencias y en 1999 tendrá que devolver al Estado un total de 3.573,2 millones.
Otro caso que hay que destacar es el de Canarias, que por primera vez desde que se aprobó el modelo, ha tenido que hacer uso de la garantía del límite mínimo de evolución de los recursos por IRPF. æpermil;sta asciende a 2.891 millones de pesetas. El análisis de los datos correspondientes a la participación territorializada de las comunidades autónomas en el IRPF muestra una merma de ingresos regionales debido, básicamente, a la reforma fiscal del PP.
Tarifa estatal
En 1999, el rendimiento de la tarifa estatal del IRPF ascendió, para el conjunto de territorios que asumieron el modelo, a 3,6 billones de pesetas. Si se comparan los rendimientos del impuesto en el año base de aplicación del modelo (1996) y en el último ejercicio de referencia (1999), se observa una merma importante de los ingresos en algunas comunidades autónomas, especialmente en Castilla y León, que en 1996 tuvo una participación en los ingresos territoriales del Estado por IRPF de 254.824 millones de pesetas, que tres años después caen a 227.301. En este caso la pérdida asciende a 27.523 millones.
No es un caso excepcional. Estos ingresos caen con más intensidad en Galicia, Asturias, Cantabria y Aragón, y en menor medida en Cantabria y Comunidad Valenciana. La dinámica del impuesto en cada territorio no es la única explicación a esta pérdida fiscal, también la reforma del IRPF tiene que ver con la caída del rendimiento territorializado.
En cuanto a la tarifa autonómica del IRPF, ésta ascendió a 705.391,7 millones de pesetas en 1999, sólo 8.000 millones más que en el ejercicio anterior. Esta cantidad no incluye la cuota autonómica de Andalucía, Castilla La-Mancha y Extremadura, por lo que el volumen total alcanza los 837.934 millones. De nuevo se producen pérdidas en los ingresos regionales, aunque no tan generalizadas como en el caso de la participación territorializada del impuesto.
Asturias obtuvo por este concepto un total de 23.661,8 millones de pesetas en 1998 y en 1999 descendió a los 22.720 millones. Murcia pasó de 16.382,7 a 15.579,5. Aragón perdió alrededor de 1.000 millones de pesetas y Castilla y León redujo su rendimiento en 3.000 millones, hasta los 43.887 millones en 1999.
Sanidad busca transferir las competencias en bloque
El secretario general de Gestión y Cooperación Sanitaria del Ministerio de Sanidad y Consumo, Rubén Moreno, manifestó ayer su confianza en que las transferencias sanitarias a las 10 comunidades autónomas pendientes de recibir esta competencia se produzcan "en bloque" gracias al acuerdo de financiación firmado el pasado mes de julio, informa Europa Press.
Moreno explicó en el marco de la reunión del Comité Regional de la OMS para Europa que, aunque las transferencias (que concluirán previsiblemente en el 2002) se materializarán mediante reales decretos individualizados por comunidad autónoma, dicho pacto de financiación favorecerá un pacto unitario.
"El acuerdo de financiación ha sido muy positivo porque supone una mayor dotación económica y posibilitará una mayor evolución de los recursos", destacó el responsable de Gestión y Cooperación Sanitaria, que ha encabezado las reuniones por parte del Ministerio de Sanidad.
El pasado mes de julio, el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) respaldó por unanimidad el nuevo modelo de financiación autonómica que, entre otras novedades, contempla la creación de un fondo de cohesión sanitaria con cargo a los Presupuestos del Estado para asegurar el gasto en Sanidad, especialmente en materia de desplazados.
Dicho modelo prevé la creación de un fondo de renta relativa para compensar a las comunidades cuya renta es inferior a la de la media nacional.