Economía cifra en 4.000 millones las indemnizaciones de Gescartera
Economía estimó ayer en 4.000 millones de pesetas el dinero que el fondo de garantía de inversiones deberá aportar a los damnificados por el caso Gescartera. Ayer, precisamente, se reunieron representantes de firmas de Bolsa para discutir el fondo de garantía de inversiones. Este fondo deberá indemnizar a los afectados por los casos AVA y Gescartera.
Una decena de representantes de firmas de Bolsa se reunieron ayer por primera vez en la sede de la CNMV con el objetivo de crear el fondo de garantía de inversiones. Este fondo, que nacerá con un capital de 25 millones de pesetas, tendrá carácter retroactivo, lo que quiere decir que tendrá la obligación de compensar a los afectados de los casos AVA y Gescartera.
Las indemnizaciones de ambos casos puede ascender, según los primeros cálculos, hasta 40.000 millones. No obstante, fuentes oficiales de Economía estimaron ayer el monto sólo para Gescartera, cuyo máximo responsable es Antonio Camacho, en 4.000 millones.
El real decreto aprobado a principios de agosto prevé, asimismo, que las entidades adheridas al fondos de garantía de inversiones, al que están obligadas todas las firmas de Bolsa, deberán realizar una aportación anual equivalente al dos por mil del dinero en efectivo que los clientes hayan depositado en ellas más el 0,1 por mil de los activos gestionados.
Esto ha provocado un malestar entre las firmas de Bolsa que en más de una ocasión han manifestado su disconformidad argumentando que "los platos rotos de unos cuantos no han de pagarlos todos". Algunas han reconocido que si han de hacer frente a las cuantía se verán abocadas a cerrar sus negocios, ya que lastrarán sus resultados de una forma "muy significativa".
El real decreto establece que si el patrimonio existente en el fondo no es suficiente para hacer frente a los pagos, "la sociedad gestora de un fondo requerirá a las entidades adheridas a aquél la realización de las derramas necesarias para subsanar el correspondiente desequilibrio patrimonial".
Estos pagos se realizarán dependiendo de dos factores, según el número de clientes y el volumen de activos. La obligación de hacer frente a estas cuantía ha sido el aspecto más criticado. A este difícil panorama se une también la postura de las agencias y sociedades no miembros de Bolsa, que se han considerado discriminadas.
El real decreto admite que las firmas que sean miembros de Bolsa se segreguen del fondo principal a condición de que constituyan un segundo con un patrimonio separado del resto. Esto supondrán que no respondería a los agujeros financieros que pudieran aparecer en las firmas no miembros.
En cualquier caso, de la reunión mantenida ayer saldrá un fondo y la derrama necesaria para cubrir las indemnizaciones de AVA y Gescartera, se pagará entre todos.
Durante los últimos días se ha especulado con la posibilidad de que los bancos eludieran los pagos al fondo de garantía de inversiones. De cualquier modo, la cuota de estos puede reducirse significativamente si deciden que la mayor parte de sus depósitos de activos se localicen en el banco y no en la firma.
El real decreto admite que el fondo pida financiación para hacer frente a sus obligaciones.