El presidente de France Télécom pide calma a los pequeños accionistas
El presidente de France Télécom, Michel Bon, ha pedido paciencia a los pequeños accionistas del operador francés de telecomunicaciones a raíz de la fuerte caída bursátil de los títulos de la compañía por la inquietud que ha suscitado la fuerte deuda del grupo, de 64.900 millones de euros (10,79 billones de pesetas). No obstante, ayer cerró con una subida del 7,54%.
"Hoy, cuando hay una gran crisis bursátil, no es el momento de vender. Es mejor esperar. Para aquellos que tienen dinero, sin embargo, es una buena oportunidad de reducir el precio medio de compra adquiriendo acciones", declaró Bon en RTL.
El patrón de France Télécom ha reiterado su confianza en la capacidad de la empresa para sobrellevar la situación y reiteró su apoyo a la estrategia de expansión de la compañía con la compra el año pasado de Orange, que ha convertido al grupo en el segundo operador de telefonía móvil en Europa, con 35,5 millones de clientes.
Bon señaló que no se arrepiente en absoluto de esa compra y añadió que la compañía puede generar los fondos necesarios para hacer frente al pasivo que arrastra sin tener que recurrir al Estado, que controla el 54% del capital del antiguo monopolio telefónico.
También añadió que el grupo no contempla despidos, aunque sí tienen en marcha desde hace meses planes de bajas incentivadas que se están cubriendo de forma voluntaria.