La entrada de turistas creció un 3% y supera los 21 millones hasta junio

Durante el primer semestre de este año entraron en España 21,3 millones de personas, cifra que supone un aumento del 3,2% con respecto a enero-junio de 2000. Los ingresos por turismo totalizaban hasta abril 16,1 billones, con un crecimiento interanual del 15%.

La caída del mercado alemán, que afecta so-bre todo a Baleares; la fuerte subida de los precios de los hoteles, un 7,6% más caros que hace 12 meses y los conflictos laborales en Iberia y en los aeropuertos no han sido óbice para que el sector turístico español siga batiendo récords en visitantes y, sobre todo, en ingresos.

Las cifras avanzadas ayer por el secretario de Estado de Comercio y Turismo, Juan Costa, aunque confirman la moderación en las tasas de crecimiento apuntadas ya el año pasado, eleva a 32,6 millones el número de visitantes extranjeros que llegaron a España entre enero y junio, un 2,6% más que en el mismo periodo de 2000. De ellos, 21,3 millones fueron turistas, con un crecimiento del 3,2%, y los 11,3 millones restantes, excursionistas.

Esta positiva evolución permite a los técnicos de la secretaría de Estado estimar que en los cuatro meses de la temporada de verano se contabilizarán 23 millones de turistas, que suponen un moderado aumento, entre el 2% y 3% respecto a junio-septiembre de 2000, en línea con la media anual, y que augura un nuevo máximo histórico para final del ejercicio.

Canarias fue el principal destino de los turistas llegados hasta junio, con el 25% del total, seguido de Baleares y Cataluña, con un 19% cada uno; Andalucía, con el 15%, y la Comunidad Valenciana y Madrid, con el 9% y 7%, respectivamente. Todas estas zonas mejoraron sus resultados con respecto al primer semestre de 2000, con la única excepción de Baleares, que registró una caída de 238.029 turistas (-5,6%), que el secretario de Estado atribuyó sólo en parte al impuesto ecológico anunciado por el Gobierno autonómico y que será recurrido ante el Tribunal Constitucional.

Como en años anteriores, el Reino Unido y Alemania fueron los principales mercados emisores de turistas hacia España, aunque con comportamientos diferentes. Así, mientras la entrada de británicos crecía el 3%, hasta 5,8 millones, la de alemanes descendía un 8%, hasta 4,8 millones, principalmente en Baleares. En este punto, Juan Costa se permitió aconsejar el Gobierno insular que haga "una reflexión sobre el comportamiento de su política turística y los efectos que ésta ha podido tener sobre la pérdida de atractivo de las islas para el mercado alemán". Francia, con 2,4 millones de turistas (un 11% más), es el tercer mercado emisor y fuera de la UE destaca la recuperación del turismo japonés, que crece un 30%.

Ingresos y pagos

En contraste con la moderación en el crecimiento de las entradas, los ingresos por turismo muestran un ritmo de crecimiento cinco veces superior, impulsado principalmente por la subida de los precios. Los últimos datos de la balanza de pagos del Banco de España elevan a 1,16 billones de pesetas (9.698,1 millones de euros) los ingresos turísticos acumulados en el periodo enero-abril, que suponen un aumento interanual del 15%.

Mientras, los pagos por turismo, correspondientes a los gastos de los españoles en el extranjero, alcanzaron los 323.321 millones de pesetas (1.943,2 millones de euros), con un crecimiento del 22% sobre enero-abril de 2000.

Con estas variables, el saldo de la balanza turística en el primer cuatrimestre de este año arroja un superávit de 1,29 billones de pesetas (7.755 millones de euros), que permite financiar el 80% del déficit comercial en el periodo. Una tasa de cobertura que Juan Costa espera que sea "significativamente superior al final del ejercicio".

El impacto negativo de la subida de los precios turísticos sobre la demanda y la inflación fue también objeto de atención por parte del secretario de Estado, quien afirmó que "al Gobierno le preocupa el comportamiento de los precios del sector", y advirtió a los empresarios que "no se puede asumir una subida de precios que no tenga como contrapartida una significativa mejora de la calidad".