Aznar e Ibarretxe reanudan hoy el diálogo interrumpido hace un año
José María Aznar y Juan José Ibarretxe se verán hoy en La Moncloa, 13 meses después de su último encuentro y a dos meses del triunfo electoral del segundo en el País Vasco. Desde el Gobierno y el PNV se observa la entrevista con pesimismo.
El encuentro de hoy llega precedido por la entrevista que Ibarretxe mantuvo con el rey Juan Carlos hace una semana y también por la confirmación de la ofensiva que ETA ha programado contra intereses turísticos. Desde el Gobierno se ha hecho hincapié en que la cita se afronta con una actitud "constructiva", pero al mismo tiempo se ha añadido que el lehendakari tiene la obligación de rendir cuentas sobre su estrategia para combatir el terrorismo. Ninguna de las dos partes es optimista.
La cita entre Aznar e Ibarretxe también viene precedida de las entrevistas que ayer publicaron La Vanguardia con el presidente del Gobierno, y El Correo con el lehendakari. Aznar advertía que "ninguna parte de España va a ser segregada" y que si se plantea la autodeterminación, defenderá la vigencia común de España y el pacto constitucional. Y añadía: "Ibarretxe debe demostrar con hechos que rectifica".
Por su parte, el lehendakari comentaba ayer en El Correo que los únicos que hablan de autodeterminación e independencia son el Gobierno español y Aznar. Y asegura: "El Estatuto ya no es un punto de encuentro". Sugería que la lucha "por la libertad y contra la dictadura de ETA no debe interferir en el debate" sobre autogobierno.
A todo ello hay que añadir la actitud adoptada por el Gobierno vasco y por el PNV en las semanas previas a la entrevista. En primer lugar, no han cuestionado la eficacia del Ministerio del Interior en la lucha contra el terrorismo. En segundo lugar, han intentado desactivar la versión que daba por hecho que Ibarretxe presentaría al Rey su plan para convocar un referéndum a favor de la independencia del País Vasco, algo que, según los nacionalistas, ni ocurrió ni tampoco es una prioridad.
Al margen de estos episodios, la entrevista se celebra en una situación política distinta que la de hace 13 meses. En junio del año pasado, el Gobierno de Aznar y el PP albergaban la confianza de una pronta convocatoria de las elecciones vascas y también del triunfo de su candidato, Jaime Mayor Oreja. Fallaron los dos pronósticos: Aznar tuvo que esperar 11 meses a la celebración de las elecciones autonómicas y sus resultados sentaron al ex ministro del Interior en los bancos de la oposición del Parlamento vasco. Aquel encuentro entre Aznar e Ibarretxe dejó muy mal recuerdo en La Moncloa. En la sede del Ministerio del Portavoz, Ibarretxe confirmó a los periodistas que había reivindicado ante su anfitrión el derecho a la autodeterminación del pueblo vasco, en una intervención que fue calificada como un "mitin" por el Ejecutivo central.
El lehendakari encara la entrevista de hoy en una posición mucho más cómoda que entonces en el Parlamento autónomo.