La divisa europea recupera un 2% la víspera de la reunión del BCE

El euro se benefició ayer de los comentarios políticos realizados desde el otro lado del Océano Atlántico, en un ambiente de clara expectación ante la reunión de hoy del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE). Lo cierto es que la divisa europea superó ayer la marca de los 87 centavos de dólar, después de que el presidente de EE UU, George Bush, afirmara que un dólar fuerte perjudica las exportaciones estadounidenses.

Poco después de que el BCE fijara su cambio oficial en 0,863 dólares, la moneda única llegó a intercambiarse por la tarde en el Viejo Continente a 0,8716 dólares, un 2% más que el valor registrado al inicio de la sesión.

La recuperación del euro se ha producido horas antes de que el Consejo de Gobierno del BCE se reúna hoy de nuevo. Los expertos no esperan que la autoridad monetaria decida una bajada de los tipos de interés (actualmente situados en el 4,5%), a pesar de que ayer se conociera que la tasa interanual en la zona euro había caído en junio hasta el 3%, por primera vez en cinco meses, frente al 3,4% de mayo.

Algunos como Otmar Lang, de Deutsche Bank Research, consideraron ayer que la bajada del IPC en junio "no será suficiente" para que el banco europeo se decida a abaratar el precio del dinero.

Los tipos, estables

"Las tensiones inflacionistas disminuyen, el precio del petróleo tiende a bajar y el euro parece estabilizarse, pero a pesar de ello no creemos que el BCE baje los tipos mañana", añadió a Efe. El analista remitió también a la última rueda de prensa del BCE el 5 de julio, en la que su presidente, Wim Duisenberg, afirmó que los tipos de interés del área son adecuados para mantener contenida la inflación a medio plazo y que "seguirán siendo apropiados durante cierto tiempo". Para Lang, el principal problema estriba en que "la inflación sigue superando ampliamente el 2%", tope fijado por la entidad europea.

Por otro lado, los últimos datos de algunas de las mayores economías del área apuntan a una tímida recuperación de la coyuntura, añadió el experto. En Alemania, las exportaciones experimentaron en mayo un ascenso del 4,8% y la producción en la construcción aumentó por primera vez en dos años. En el conjunto de la zona euro, el PIB del área creció en los primeros tres meses un 2,6%, frente al 2,5% estimado inicialmente.

Sin embargo, numerosos sectores consideran que aún no existen señales convincentes de recuperación y siguen demandando una pronta bajada de las tasas que revitalice la economía. La ralentización del crecimiento económico está afectando a los márgenes de grandes grupos empresariales europeas, como la holandesa Philips, que el martes anunció pérdidas superiores a lo previsto en el segundo trimestre y que recortará 10.000 empleos para reducir costes.

Con todo, algunos indicadores ya están anticipando un próximo abaratamiento del dinero.

Así el mibor, la referencia más utilizada parar calcular el tipo de interés de los préstamos hipotecarios en España, cayó en junio al 4,310%, mínimo anual.