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INTERNACIONAL

Argentina coloca deuda al 14%, dos puntos más de lo pedido por Cavallo

Una jornada electrizante en los mercados argentinos concluyó ayer con respiro, que no alivio, para el Gobierno.

Tras rumores y versiones dispares y, en algunos casos, disparatadas, los bancos cedieron algo en su enfrentamiento con el ministro de Economía, Domingo Cavallo, y tomaron deuda pública a un precio un poco por encima de lo que había solicitado el jefe del Palacio de Hacienda.

La licitación de las Letras del Tesoro (Letes) y los Bonos del Tesoro (Bontes), por un total de 850 millones de dólares, había estado precedida por una reunión de Cavallo y banqueros el lunes. Allí, el ministro pidió que el tipo de interés no superara el 12%. Finalmente, y cuando se esperaba que el precio fuera de un 16%, el mercado sorprendió al tomar Letes por 14,1% y Bontes por 15,96%. El viernes pasado, el rendimiento de los Bontes rondaba el 22% (aunque ayer la colocación de estos títulos fue mínima, el 4% del total).

Desde este punto de vista y en el contexto de la jornada, un operador dijo que "esto significa un respiro para Cavallo. Luego de haber tirado de la soga al máximo, los bancos extranjeros, principalmente, le han dicho al ministro que le otorgan cierta confianza por sus anuncios de mayor reducción del gasto público".

Mientras la Bolsa caía el 6,14% y el riesgo-país llegaba a superar los 1.200 puntos, bastante mayor que el regiestrado el lunes, cuando el presidente, Fernando de la Rúa, firmó un decreto que confiere más poderes a Cavallo en la administración de la Seguridad Social.

Ahora, los Ministerios tendrán 48 horas para informar cuáles son las reducciones de gasto que se pueden hacer. Y Cavallo ha anunciado que esas reducciones, más las que afectarán a las provincias, significarían un ahorro de entre 1.600 y 2.000 millones de dólares de aquí a fin de año. Esto ha desatado temores entre los empleados y proveedores del Estado. Pero la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, aseguró que no habrá despidos ni rebaja de salarios. Sin embargo, una serie de huelgas ha comenzado en algunos sectores de la Seguridad Social, cuyos trabajadores denuncian que el Gobierno prepara la privatización del sistema de salud pública a pensionistas y jubilados. Algo que Cavallo se ha apresurado a desmentir.

Otras huelgas han estallado en la provincia de Buenos Aires, gobernada por el ex vicepresidente peronista Carlos Ruckauf, quien ha pagado parte de los sueldos de sus funcionarios con bonos, por falta de efectivo. Mientras banqueros y economistas piden mayor rigor, la oposición al ajuste crece.

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