El inicio de la campaña turística se estrella por problemas aéreos
Los problemas relacionados con el transporte aéreo y los aeropuertos se acumulan al inicio de la campaña turística de verano. Ayer, día del primer gran éxodo estival, se sucedieron las malas noticias paras las personas que tenían o tienen previsto usar el transporte aéreo para desplazarse a su lugar de descanso.
El contratiempo más grave se concentró en los aeropuertos de las Islas Baleares, especialmente en el de Palma de Mallorca, que suele marcar máximos de afluencia en verano. Miles de pasajeros, una gran parte de ellos alemanes, se vieron afectados por la huelga del transporte discrecional por carretera que secundan los trabajadores desde la medianoche del jueves, por lo que los turistas se encontraron con serias dificultades para ser trasladados desde los aeropuertos a sus respectivos alojamientos.
La protesta, que persigue forzar un acuerdo en el convenio colectivo, provocó tensión, nervios y esperas de más de una hora para conseguir un taxi, que fueron acaparados por los touroperadores para atender a sus clientes.
Incluso llegaron a producirse incidentes leves entre piquetes sindicales y conductores de vehículos privados a los que acusaban de transportar viajeros hasta el aeropuerto por encargo de los touroperadores, quienes ya han pagado decenas de millones de pesetas al millar de taxistas que continuamente llegan o parten de los aeropuertos con problemas.
Esta situación puede prolongarse todo el fin de semana, dado que las negociaciones abiertas entre la patronal y los sindicatos concluyeron sin acuerdo. æpermil;stos reclaman, entre otros puntos, un aumento salarial del 17% en tres años, mientras que los empresarios ofrecen un 15%. Ante esta situación, el presidente del Gobierno balear, Francesc Antich, decidió ofrecerse como mediador y convocar a las partes implicadas en el conflicto para solucionarlo cuanto antes o, al menos, conseguir que se respeten los servicios mínimos fijados, que son del 80% de la actividad habitual.
Estos problemas en tierra no afectaron a los vuelos. El portavoz de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) explicó que los aeropuertos de Mallorca, Menorca e Ibiza trabajaron todo el día con normalidad.
Los que sí puede alterar esta normalidad en los vuelos es la huelga que mantienen los pilotos de Iberia para todos los martes de julio y todos los lunes de agosto.
El sindicato de pilotos, Sepla, y la dirección de la compañía aérea volvieron a levantarse el viernes de la mesa de negociación del convenio colectivo sin acuerdo. Fuentes de ambas partes señalaron que las posiciones siguen enfrentadas y manifestaron que es prácticamente inevitable la huelga del próximo martes.
Iberia anunció que los servicios mínimos dictados por Aviación Civil permiten mantener más del 76% de los vuelos ese día. Por esta razón, se cancelarán 238 vuelos de un total de 1.019 que estaban programados para ese día.
Mientras, Enrique Donaire, nombrado recientemente director general de Iberia y nuevo encargado de negociar con los pilotos, dirigió ayer una carta al Sepla. En ella, Donaire recuerda a los pilotos que "las reservas para este verano ya han caído de manera significativa; nuestra competencia, como podrá ver por sus anuncios y aprovechándose de nuestra débil situación, se está forrando a costa nuestra y el mercado presenta indicadores de debilidad respecto a la demanda que nos obliga a poner en marcha los planes de contingencia que teníamos previstos".
Los problemas en los aeropuertos no acabaron ahí. Los trabajadores afiliados a CC OO de FCC Medio Ambiente, adjudicataria de la limpieza del aeropuerto de El Prat de Barcelona, secundaron ayer una jornada de huelga. Los paros afectaron al mantenimiento de los aseos públicos, vaciado de papeleras y a las instalaciones de las terminales.