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La Bolsa de Lisboa firma su integración en Euronext

Euronext, la Bolsa resultante de la fusión de París, Amsterdam y Bruselas, ha atraído también al mercado portugués. La Bolsa de Lisboa y Oporto firmó en la noche del miércoles un acuerdo con Euronext que contempla la fusión de ambos mercados.

Euronext Lisboa. Así se llamará la Bolsa portuguesa cuando fructifique el acuerdo que firmó con Euronext. Ambos mercados se fusionarán en un futuro, según los términos del pacto, y el mercado portugués se incorporará a Euronext en las mismas condiciones que ahora están París, Amsterdam y Bruselas. Asimismo, todos los activos negociados en Lisboa pasarán a negociarse en Euronext.

Lisboa ya había hecho público su acercamiento a Euronext en octubre del año pasado, cuando solicitó entrar en la plataforma al tiempo que ésta echaba a andar. Se-gún el mercado luso, la plataforma de Euronext, que contempla un modelo de integración con una sola plataforma de negociación para varios mercados, es el más apropiado para las necesidades de Lisboa.

El propio presidente de la Bolsa de Lisboa, Manuel Alves Monteiro, explicó a Reuters que la fusión creará las condiciones para un aumento de la liquidez en el mercado luso. El volumen de negocio de la Bolsa de Lisboa durante este año ha sido inferior a los 100 millones de euros al día, y la falta de negocio ha influido en que el índice PSI 20 pierda un 16,6% en el año.

"Una Bolsa como la de Lisboa no puede quedar aparte de una oleada de integraciones entre los mercados europeos de mayor tamaño", comentó Alves a la agencia Reuters. "Algunas Bolsas europeas podrán mantenerse solas durante un tiempo, pero no mucho".

La entrada de Lisboa en Euronext es el segundo triunfo de la plataforma liderada por París, que ha sido la única que cuajó. Fue la primera en presentarse en sociedad, hace más de un año, pero el anuncio de fusión entre Francfort y Londres, apoyado por Nasdaq, tuvo una mayor repercusión. De hecho, Madrid y Milán firmaron acuerdos de intenciones con iX.

Fracaso de iX

Pero iX fracasó estrepitosamente por la susceptibilidad británica. La fusión estalló por los aires. Las repercusiones del fracaso llevaron a que la Bolsa de Estocolmo plantease una OPA hostil sobre Londres, y a que los accionistas de este mercado estuviesen a punto de expulsar al equipo directivo. Y Nasdaq ha preferido desembarcar en Europa en solitario mediante la compra del devaluado Easdaq.

Mientras tanto, sin hacer ruido, Euronext se constituyó en octubre pasado. Ahora está integrando los sistemas de compensación y liquidación, al tiempo que da entrada a nuevas plataformas en el capital. Así las cosas, Euronext ya lleva una gran ventaja (más de un año) a cualquier proyecto de integración a nivel europeo que se plantee a partir de ahora.

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