El presidente de Seat aplica un plan de choque para renovar la gama de coches
El presidente de Seat, Bernd Pischetsrieder, ha decidido adoptar medidas de choque para que la marca española logre posicionarse de una vez por todas dentro del grupo Volkswagen (VW). Por el momento, Pischetsrieder ha paralizado la renovación de la futura gama de automóviles de Seat para someterla a una revisión.
El primer ejecutivo de Seat y principal candidato a la presidencia de Volkswagen, Bernd Pischetsrieder, ha decidido tomar medidas en la filial española para posicionarla dentro del consorcio alemán y aumentar su rentabilidad. Según declaró él mismo a la revista interna de Volkswagen, Autogramm, el problema de Seat es que ¿el cliente no asocia algo preciso con esta marca¿ y que ¿hoy día es como una marca de ocasión¿, a diferencia de lo que ocurre con otras marcas del grupo.
Tras estas declaraciones, la primera medida de choque decidida por Pischetsrieder ha sido paralizar la renovación de la gama de automóviles de Seat. Concretamente, el centro técnico de Seat en Martorell (Barcelona) ya estaba trabajando en el proyecto del coche que debe sustituir a los actuales modelos Toledo y León. Este proyecto ha sido paralizado para someterlo a una profunda revisión.
Según algunas fuentes, Pischetsrieder pretende que Seat fabrique coches de mayor tamaño y, por lo tanto, que aporten mayor rentabilidad a la cuenta de resultados de la compañía. El proyecto que desarrollaba el centro técnico de Martorell para sustituir al Toledo se basa en la plataforma que VW denomina PQ35 y partía de parecidas dimensiones a las del actual modelo (4,44 metros de largo).
Precisamente, Pischetsrieder, cuando presidía BMW, fue el principal impulsor de que el fabricante británico Rover desarrollara el Rover 75, un vehículo de 4,75 metros y un precio de entre cuatro y cinco millones de pesetas. La gama del actual Toledo se vende a un precio que va desde los 2,7 a los 3,8 millones.
Según Pischetsrieder, Seat no debe limitarse a lanzar modelos aislados ¿como el Seat León Cupra¿, sino que debe crear una ¿familia de productos¿. En su opinión, ¿la marca debe tener un carácter reconocible para el cliente y no puede consistir sólo en la adición de modelos deportivos¿. Sin embargo, durante los últimos años, el departamento de marketing de Seat siempre ha basado sus campañas en destacar el carácter mediterráneo y deportivo de la marca española. Además, durante la presidencia de Pierre Alain De Smedt, VW fichó al diseñador de Alfa Romeo Walter De¿Silva (autor del Alfa 156) para potenciar esa imagen deportiva y mediterránea. Incluso el lema actual de Seat es ¿Auto Emoción¿. El consorcio Volkswagen está elaborando actualmente el plan de reparto de producciones para las diferentes marcas y fábricas del grupo denominado PR50. Pischetsrieder tiene hasta final de año para que el centro técnico de Martorell revise el proyecto del nuevo Toledo-León y presente una alternativa satisfactoria.
Clientes fieles
Seat es la firma europea que cuenta con una de las clientelas más joven, con una media de 38 años de edad. Pischetsrieder considera que se debe fidelizar a esos clientes que actualmente cambian de marca cuando quieren un coche más grande.
La paralización de los nuevos modelos no afecta al próximo Ibiza/Córdoba que será presentado en el Salón de Francfort. Este coche está totalmente desarrollado y entrará en producción en noviembre para ser comercializado a partir de enero de 2002. El nuevo modelo es un coche más grande que el actual, sobre todo en anchura, que pretende situarse en un segmento de mercado ligeramente más alto.
Pischetsrieder cree que ¿Seat vivirá tres o cuatro años difíciles¿ y que se tardarán unos cinco años hasta que cualquier persona identifique a Seat con sólo ver ¿sus siluetas y contornos¿.