Hewlett-Packard paga 78.400 millones por un conflicto de patentes
El fabricante informático y de impresoras Hewlett-Packard (HP) se ha comprometido a pagar 400 millones de dólares (unos 78.400 millones de pesetas) al proveedor de equipos para oficina Pitney-Bowes para resolver un conflicto de patentes que las enfrentaba desde 1995.
Pitney Bowes había demandado a Hewlett-Packard, acusándola de violar una de sus patentes de tecnología para impresoras. Y ambas han mantenido un largo enfrentamiento en tribunales, con varias sentencias que se anulaban entre sí.
El caso iba a ser retomado ayer mismo con un juicio en un tribunal de Connecticut. Pero las compañías han decidido poner fin a su guerra judicial con un acuerdo en el que HP no reconoce culpabilidad alguna, pero sí se compromete a indemnizar a Pitney-Bowes.
Ann Baskins, vicepresidente de HP, dijo a través de un comunicado que con este pacto quieren "evitar los costes, la dedicación de tiempo, la incertidumbre y las distracciones propias de una larga batalla legal". Además, HP y Pitney-Bowes han sellado un "acuerdo de licencia de tecnología" (del que no han querido ofrecer detalles) que esperan que aporte a ambas compañías nuevas "oportunidades tecnológicas y de negocio".
Provisión contable
El primer efecto para HP será, sin embargo, una revisión de sus resultados trimestrales. La compañía piensa incorporar la indemnización a Pitney-Bowes como provisión extraordinaria en los resultados correspondientes al segundo trimestre fiscal.
HP había cerrado el trimestre con 11.610 millones de dólares de facturación y 307 millones de dólares de beneficio (incluyendo cargas de reestructuración). Y piensa comunicar el nuevo dato de resultados el 14 de junio.
En Wall Street, los inversores respondieron impulsando al alza las acciones de HP, que ganaron un 1,2% al cierre. Las acciones de Pitney-Bowes acabaron con un descenso del 0,15%.