Aceralia aumenta un 77% su valor bursátil en apenas cinco meses
El presidente de Aceralia, José Ramón Álvarez Rendueles, tiene sólidos argumentos para garantizarse hoy una plácida junta de accionistas. La compañía siderúrgica se ha revalorizado en Bolsa en lo que va de año un 77%, cerró el ejercicio pasado con unos beneficios netos de 60.117 millones de pesetas y en el primer trimestre de 2001 ganó 16.788 millones de pesetas. Mientras, la sociedad está a la espera de lo que decidan las autoridades comunitarias sobre la fusión con Usinor y Arbed.
Con el ojo puesto en Bruselas, los accionistas de Aceralia han visto en lo que va de año cómo los títulos de la compañía siderúrgica se han revalorizado casi siete euros (1.164,7 pesetas). En enero las acciones de Aceralia cotizaban a 9,08 euros (1.510,7 pesetas) y el pasado sábado cerraban a 16 euros (2.662,18 pesetas).
La mitad de este año en Aceralia no sólo la ha protagonizado el buen recorrido bursátil de sus títulos. La anunciada fusión con Arbed y Usinor ha catapultado el valor de la compañía en Bolsa, que ahora se sitúa en los 2.000 millones de euros (332.772 millones de pesetas). La vuelta de algunos inversores a los sectores tradicionales abandonando las nuevas tecnologías y los negocios relacionados con Internet han favorecido también el aumento en la cotización de Aceralia.
Pero el crédito de la compañía presidida por José Ramón Álvarez Rendueles va más allá. En 2000, la fuerte demanda de productos siderúrgicos y los buenos precios, entre otros factores, sirvieron para presentar un resultados récord con un beneficio neto de 60.117 millones de pesetas (361.3 millones de euros). La compañía repartirá un dividendo bruto total de 115 pesetas si los accionistas aprueban hoy un reparto de 90 pesetas por título con cargo a resultados y a reservas. En enero ya entregó 25 pesetas. La evolución este año va por el mismo camino que en 2000. Aceralia ganó el primer semestre de este año 16.788 millones de pesetas, algo más de 100 millones de euros.
Pero, quizá, uno de los retos que va a tener la empresa española es sacar adelante la fusión con la luxemburguesa Arbed, su accionista de referencia, y con la francesa Usinor, lo que daría lugar al nuevo líder siderúrgico mundial.
La operación no se cerrará hasta, por lo menos, los primeros meses del año próximo. La CE no ha tomado todavía una decisión al respecto, aunque los ejecutivos de las tres compañías han señalado en varias ocasiones que la Comisión no impondrá "grandes obstáculos".
Fusión con Arbed y Usinor
La integración, de producirse, y que necesitará de la convocatoria de una junta general extraordinaria de fusión, no supondrá una modificación del plan inversor previsto por Aceralia para el periodo 2000-2004. A este plan se van a destinar unos recursos de 1000 millones de euros (166.000 millones de pesetas).
Ya a lo largo del año pasado se invirtieron casi 50.000 millones de pesetas dirigidos, fundamentalmente, a la nueva planta de Zaragoza para la elaboración de productos de mayor valor añadido, como el tailor blank, a la nueva línea de panel sándwich en Pamplona, a la línea de alambrón de Gijón y las instalaciones de frío en Sagunto (Valencia). De los 115.000 millones de pesetas que faltan por invertir hasta 2004, las principales partidas se dirigirán a ampliar la capacidad productiva de la Acería compacta de Vizkaya y de Avilés, así como el tren de bandas en caliente de las fábricas asturianas.
Estos recursos servirán para potenciar las instalaciones de Aceralia cercanas a la costa, una estrategia que se ha establecido en el plan industrial previsto tras la fusión de Aceralia con Arbed y Usinor.