Los créditos de las cajas superan a los depósitos en nueve comunidades
El tirón del consumo y la inversión, el proceso de desintermediación financiera y la fuerte competencia introducida por las cajas de ahorros ha cambiado completamente el panorama de los flujos bancarios en las regiones españolas. Las entidades invirtieron el año pasado más en créditos de lo que captaron en depósitos en nueve comunidades autónomas. En 1990 fue sólo en dos de ellas.
Las entidades de crédito invirtieron el año pasado en créditos más de lo que captaron en depósitos en nueve comunidades autónomas (Andalucía, Baleares, Canarias, Cantabria, Cataluña, Valencia, Madrid, Murcia y La Rioja), según un informe de la Fundación de las Cajas de Ahorros Confederadas (Funcas). Cinco años antes, las inversiones crediticias eran mayores que el ahorro captado a través de depósitos en tres regiones (Andalucía, Canarias y Murcia). En 1990, solamente en dos: Baleares y Madrid.
Otras, como Extremadura, se acercan al equilibrio, ya que los préstamos han crecido mucho más rápido que los depósitos en los últimos años, hasta el punto de que la inversión crediticia por oficina bancaria crece en la década casi un 200% (de 349 millones de pesetas a 1.029 millones), frente a un 64% los depósitos, según Funcas.
Precisamente en esta evolución se fundamentan parte de las críticas que el sector financiero ha vertido contra la pretensión del presidente de la comunidad autónoma, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, de gravar con un impuesto a la banca la captación de ahorro. Y es que el impuesto puede empeorar el problema que surge a las entidades cuando el ahorro conseguido a través de los depósitos tradicionales no es suficiente para financiar los créditos del territorio. En cualquier caso, la llamativa transformación en la mayoría de las comunidades autónomas tiene razones económicas y financieras.
Desde el punto de vista económico, parece lógica la relación entre la fase alcista del ciclo iniciada en 1995, y sostenida sobre todo en el tirón de la demanda, y la mejora de la actividad bancaria.
Desde el punto de vista de las finanzas, uno de los aspectos que más han influido es el proceso de desintermediación financiera vivido en los últimos años, que ha afectado más al pasivo que al activo de las entidades. Y es que el crédito bancario sigue siendo la vía principal de financiación para familias y empresas, a pesar de las mayores posibilidades de financiación en otros mercados. En el caso del ahorro, sin embargo, se han desarrollado mucho más rápidamente los instrumentos vinculados al mercado de capitales alternativos a los depósitos tradicionales.
El crecimiento espectacular de las inversiones en Bolsa, de los productos de previsión y de los fondos de inversión, sobre todo hasta 1999, explica en buena medida que los depósitos hayan crecido a menor ritmo que los créditos en muchas regiones. No es ajeno que muchas entidades de crédito tuvieron tensiones de liquidez en la segunda mitad de la década de los noventa.
Otro factor explicativo se refiere a la fuerte competencia introducida por las cajas de ahorros a partir de 1989, cuando entró en vigor la completa liberalización de apertura de oficinas para estas entidades.
La agresiva política comercial practicada desde ese momento, con una fuerte expansión de sucursales y una especialización minorista en créditos, les ha proporcionado sustanciales ganancias de cuota de mercado. Funcas considera que el hecho de que tanto cajas como cooperativas presenten un mayor peso relativo de los créditos en sus balances es una contribución fundamental al crecimiento de las inversiones crediticias regionales.
Los bancos sólo ganan cuota en Galicia
Un análisis regional más detallado de la evolución de las cuotas de mercado en créditos y depósitos de bancos, cajas y cooperativas refuerza el argumento del informe de Funcas sobre la contribución de las entidades con mayor vocación territorial a la transformación de los flujos financieros de las regiones. Y es que son aquellas comunidades autónomas donde las cajas ganan más cuota de mercado en créditos en los últimos años (Cataluña, Navarra y Aragón, entre otras) donde el sector financiero se encuentra con un saldo neto mucho mayor del crédito frente a los depósitos.
En la última década, las cajas de ahorros y las cooperativas de crédito han arrebatado a los bancos cuota de mercado en créditos y depósitos de ahorro en todas las comunidades autónomas. Sólo hay una excepción: Galicia, donde los bancos ganaron 0,7 puntos porcentuales en créditos, aunque perdieron 9,3 puntos en depósitos. No en vano Galicia es una de las regiones donde aún los depósitos superan a los créditos. Los bancos sólo tienen más cuota de crédito que las cajas y cooperativas en Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Galicia, Madrid y Ceuta y Melilla.