Imprex lleva a Portugal su sistema logístico para productos de consumo
Cuando hace poco más de tres años el fabricante de pilas Energizer decidió externalizar su actividad de distribución, los directivos que estaban al cargo de esa división dejaron el grupo y constituyeron una empresa, Imprex, para hacerse cargo del negocio. Su especialidad es la gestión de toda la cadena de distribución, desde el empaquetado y la presentación del producto hasta el manipulado del mismo, las campañas de promoción y la colocación de los artículos en los puntos de venta, ya sean hipermercados o tiendas de barrio.
Según el director general de la compañía, Ramón Campos, la clave es gestionar bien la colocación del producto en el punto de venta, ya que este tipo de mercancía de gran consumo debe estar ubicada en lugares de mucha visibilidad para el cliente.
Actualmente, Imprex gestiona la distribución no sólo de Energizer, sino también de General Electric (bombillas y luminosos), Filtral (gafas), Quilosa (pegamentos y siliconas) y Bolaseca (productos antihumedad).
El nuevo reto es la entrada en nuevos mercados inter-nacionales. Imprex ha dado ya los primeros pasos en Portugal, donde ha firmado acuer-dos con tres distribuidores para que gestionen la logística de Energizer y de Bolaseca, utilizando la tecnología y el conocimiento de la compañía española.
En los próximos meses, Imprex empezará a desarrollar el negocio con las otras marcas que ya distribuye en España. Y el siguiente paso será la constitución de una sociedad filial en Portugal, una posibilidad que está en estudio.
Además de Portugal, Imprex también ha abordado los mercados del norte de África con la distribución de pilas salinas de la marca Tudor y de otros productos de Energizer.
Actividades independientes
Hasta ahora, Imprex ofrecía a sus clientes un servicio integral en la logística y gestión del producto. Pero la sociedad ha iniciado una nueva actividad para ofrecer a sus clientes cada servicio por separado. Por ejemplo, el almacenaje a medida, la exposición del producto en los lineales del híper, el diseño del empaquetado, la contratación de una campaña de mercadotecnia o la búsqueda de los mejores puntos de venta para potenciar la marca.
Imprex facturó el año pasado 6.842 millones de pesetas (41,1 millones de euros), un 10% más que en 1999, y logró un resultado neto de 127 millones. Tiene unos recursos propios de 513 millones, una plantilla de 74 personas, gestiona 12.000 puntos de venta, y para este año prevé aumentar sus ventas un 15%.