Los socios de Cantábrico negocian un consejo compatible con las medidas de Economía

Los accionistas de Cantábrico ultiman un pacto para la constitución de un nuevo consejo de administración de Cantábrico que no sea considerado por el Ministerio de Economía como una vía para eludir la anulación cautelar del derecho de voto de la portuguesa EDP y de Ferroatlántica, por su alianza con la alemana EnBW. Ayer fue un día de densas negociaciones entre los socios ante la inminencia de la junta de accionistas que se celebrará el 17 de mayo y ya que la actuación del departamento que dirige Rodrigo Rato hace imposible que se materialice los preacuerdos anteriormente alcanzados. æpermil;stos pasaban por el reparto del poder entre EDP-Cajastur y Ferroatlántica, y por la adquisición de casi un 20% adicional de Cantábrico por la empresa portuguesa.

Aunque la actual situación da la posibilidad a Cajastur de decidir la composición del consejo, que previsiblemente será provisional, esta entidad ha optado por el consenso, según fuentes consultadas. Y operar con esas dos premisas (la posición atenta del Gobierno y la necesidad de un acuerdo) aumenta los obstáculos para la formación de un consejo que deberá, además, elegir un equipo gestor. Por otro lado, los mismos medios subrayan la dificultad para formar un consejo de independientes.

El presidente de EDP, Franscisco Sánchez, que celebró ayer la junta de accionistas, subrayó que el Estado no controla la empresa.

Y también para intentar encontrar un salida a esta bloqueada situación, el vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo rato, tiene previsto reunirse con su homólogo portugués, Mario Cristina de Sousa. La reunión se proyecta para antes de la junta de accionistas de Cantábrico.