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Adolfo Domínguez está dispuesto a negociar "con el socio adecuado"

El diseñador Adolfo Domínguez se mostró ayer dispuesto a negociar una alianza si encuentra "el socio adecuado que aporte valor a la compañía" que preside. No obstante, señaló que esto no será de inmediato y que su prioridad es recuperar la credibilidad del mercado bursátil. La empresa prevé aumentar su beneficio neto en torno al 10% durante este año. También continuará con su política de expansión internacional y potenciará la nueva cadena de moda joven Línea U.

El empresario y diseñador gallego Adolfo Domínguez señaló ayer que la compañía que preside tiene tamaño suficiente para competir en solitario, pero que "si aparece el novio adecuado, habrá boda". Domínguez puntualizó que pactará "cuando encuentre el socio adecuado, de modo que no afecte al modelo de la compañía y le aporte valor".

El diseñador hizo estas declaraciones en respuesta a la reciente OPA (oferta pública de adquisición de acciones) de Cortefiel sobre la empresa Adolfo Domínguez. OPA que, según comentó, "estaba perdida desde el primer día". Domínguez, que aseguró haber vivido "el proceso con una sólida paz interior", compareció en rueda de prensa para explicar su oposición a la oferta y sus planes de futuro.

"El precio no se ajustaba a la valoración de la empresa que dan los accionistas y yo tengo mis dudas de que Cortefiel fuera el socio estratégico ideal", explicó.

Cortefiel formuló su oferta sobre la totalidad de Adolfo Domínguez el pasado 14 de marzo, a un precio de nueve euros la acción. Un movimiento que se interpretó como una reacción a las intenciones de Inditex de salir a Bolsa. El grupo presidido por Gonzalo Hinojosa pretendía adquirir un mínimo del 51% del capital de la textil gallega, que corresponde precisamente a la suma de las participaciones de control en esta compañía.

La fe de Domínguez en la cohesión de su accionariado le motivó a dar rienda suelta a su ironía : "Yo soy un chico de pueblo y acepto las leyes de la naturaleza. El pez grande se come al chico y, por eso, no tengo nada que reprochar a Cortefiel. Pero esta empresa no es tan fácil de opar y se ha demostrado que el núcleo duro, que conformamos el Grupo Puig, yo mismo y las cajas gallegas, no estamos dispuestos a vender de momento". Apostilló su discurso señalando que "mis trabajadores tienen también un porcentaje de las acciones y están conmigo hasta el final".

No obstante, Domínguez aseguró en todo momento que su prioridad es ganarse la credibilidad del mercado y se mostró consciente de que le costará : "Los accionistas tienen razón en esperar a que los excelentes resultados de este último trimestre sean consistentes". Ayer la acción recogió nuevas pérdidas en Bolsa y cerró a 8,36 euros.

La expansión continúa

El beneficio neto del grupo a 31 de marzo creció un 138%, hasta 312 millones de pesetas (1,88 millones de euros). Domínguez aseguró que las medidas que se tomaron hace dos años para reducir costes empiezan a rendir fruto y auguró que "los resultados mejorarán a lo largo de 2001 y 2002". Calcula que terminará el año ganando un 10% más. Y ello sin renunciar a la diversificación ni a su aventura internacional.

Así, anunció que este año separará la línea joven de la firma, bajo la marca Línea U. "A finales de este año tendremos 30 tiendas" en España, afirmó Domínguez. El objetivo es abrir más de 80 antes de 2003. Reconoció que algunas de ellas se explotarán en régimen de franquicia.

Otro objetivo es lograr que las tiendas en el exterior aporten el 50% de la facturación del grupo, cuando hoy es un 30%. El grupo abrirá este verano su primera tienda en EE UU, concretamente en Miami.

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