El BSCH rompe con uno de sus socios al salir del consejo de Sanpaolo-Imi
El BSCH formalizó ayer su salida del consejo de administración del banco italiano Sanpaolo-Imi, del que posee el 6,5%. La salida de los dos consejeros del banco pone fin a una de las cuatro grandes alianzas del BSCH en Europa, y deja la puerta abierta a la venta de esta participación. Los accionistas de Sanpaolo eligieron ayer su cúpula, en la que figurará como consejero independiente el ex ministro de Asuntos Exteriores Abel Matutes.
No hubo sorpresas en la junta de accionistas del banco italiano San-paolo-Imi, celebrada ayer en Turín. El BSCH formalizó su salida del núcleo estable de la entidad, en la que tenía dos consejeros (el copresidente Emilio Botín y el director general Juan Rodríguez Inciarte) merced al 6,48% que el banco español posee en Sanpaolo.
El motivo de esta salida fue la decisión del BSCH de no renovar el pacto de accionistas que le impedía aumentar su participación estratégica en el Sanpaolo, "salvo en casos extraordinarios". El resto de inversores del banco italiano optó por renovar tres años más este pacto, lo que comportaba el compromiso de no modificar la participación accionarial por un lapso de tres años.
La primera consecuencia de esta ruptura es que la participación del banco español en Sanpaolo ha dejado de ser estratégica para convertirse en financiera, por lo que el BSCH tiene ahora la vía expedita para vender parte de sus acciones en el banco italiano. El valor de esta participación es de 264.200 millones de pesetas (1.590 millones de euros). Por su venta, el BSCH obtendría unas plusvalías aproximadas de 100.000 millones de pesetas (600 millones de euros).
Hace tiempo que el BSCH se encontraba incómodo con esta alianza, que le impedía cumplir su aspiración de aumentar su participación por encima del 6,48% que posee actualmente. El discurso del copresidente Emilio Botín durante la junta de accionistas del BSCH el 10 de marzo ya dejó entrever que las relaciones con la entidad italiana no eran demasiado buenas. Botín se extendió en saludos a los otros socios europeos, como el Royal Bank of Scotland o el francés Sociéte Générale, y brillaron por su ausencia referencias al banco italiano.
Sin embargo, tanto BSCH como Sanpaolo-Imi recalcaron ayer que los acuerdos comerciales seguirán vigentes. En esa línea se expresó el presidente saliente, Luigi Arcuti, que asumirá la presidencia honoraria, aunque rehusó ha-cer demasiados comentarios para evitar una "batalla entre Madrid y Turín".
El BSCH mantiene otra complicada alianza en Europa: en Alemania, es titular del 4,8% del cuarto banco alemán, Commerzbank, y éste tiene un 1,8% del BSCH. El año pasado, la entidad española quiso ampliar su presencia hasta el 10%, en un momento en que el Commerz estaba bajo la amenaza de OPA. El BSCH ofreció a cambio su filial alemana CC Bank. Sin embargo, el precio y el acuerdo del Commerz con Generali frustraron la operación. Por ahora, las entidades mantienen buenas relaciones y un acuerdo en el negocio de pymes.
En la reunión de ayer, el BSCH votó a favor en todas las propuestas del consejo, entre las que figuraban la elección del nuevo presidente y del nuevo consejo, formado por 14 personas. El cargo de presidente recayó en Rainer Stefano Masera, hasta ahora consejero delegado.
Entre los nuevos consejeros independientes estará el ex primer ministro español de Asuntos Exteriores Abel Matutes. Matutes es accionista del banco italiano desde que el entonces Istituto San Paolo de Torino adquiriera a principios de los noventa el Banco de Ibiza, del que Matutes era propietario. En el consejo también estará el ex embajador estadounidense en España Richard Gardner.
La complicada relación con las finanzas italianas
El enmarañado mundo de las finanzas italianas no le ha dado muchas alegrías al BSCH. Ahora se queda sin un aliado en la banca de Italia con su salida del Sanpaolo-IMI. Pero ya el año pasado Generali le dio otro motivo de disgusto.
La primera aseguradora italiana, con presencia en varios bancos del país, decidió apostar por Alemania y duplicar su presencia en el cuarto banco germano, Commerzbank, en el que ahora tiene un 10%.
Pagó parte de la operación vendiéndole al banco alemán un 0,66% de las acciones que Generali tenía en el BSCH. Así que ahora su presencia se ha visto reducida hasta el 1,13% actual.
La aseguradora insiste en que las relaciones que mantiene con el grupo bancario español son "excelentes, muy buenas". Pero, por otra parte, tampoco ha dejado entrever su intención de estrecharmás sus lazos.