La integración económica centrará el debate en la reunión de Quebec
Los 34 jefes de Estado y de Gobierno de los países americanos se reúnen este fin de semana en Quebec (Canadá) para intentar avanzar hacia la integración del continente. Los aspectos económicos centrarán el interés de la reu-nión, donde se pretende concretar temas específicos de negociación para la creación del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) en 2005.
Desde hoy y hasta el domingo, los jefes de Estado y de Gobierno americanos (excepto Cuba) se dan cita en Quebec para tratar de avanzar hacia la creación del ALCA, con los obstáculos que se han constatado para ello en la reunión de los ministros de Economía del 7 y 8 de abril pasados en Buenos Aires.
La agenda de trabajo se agrupa bajo el fortalecimiento de la democracia, la creación de prosperidad y la realización del capital humano. A lo largo de sus siete años de historia, la Cumbre de las Américas ha insistido en la necesidad de que los avances económicos estén respaldados por instituciones democráticas estables que den cohesión a la integración del continente. Esta cláusula sirve, además, para mantener el aislamiento del régimen de Fidel Castro.
En esta cumbre, y fruto del debate suscitado por las protestas contra la globalización surgidas en 1999 en Seattle (Estados Unidos), se incluye un amplio temario social que abarca desde los derechos de los pueblos indígenas a la perspectiva de género, el acceso a la educación y los recursos para asistencia sanitaria.
El verdadero meollo de la cumbre será la integración económica. Canadá, como anfitrión, ha incluido en la agenda temas tan conflictivos como la energía y el medio ambiente (más aún tras el rechazo de EE UU al Protocolo de Kioto), las tecnologías de la información y las telecomunicaciones, la responsabilidad social de las empresas, los sistemas de transporte y la regulación financiera.
El Gobierno canadiense se ha fijado como meta que en la cumbre se traten aspectos concretos de la integración económica, más allá de la declaración y el plan de acción que los dirigentes americanos harán públicos al término de la reunión.
Quebec quiere abordar la protección a la propiedad intelectual y la rebaja de los aranceles impuestos por los distintos bloques económicos del continente a terceros países, que afectan principalmente a las economías más desarrolladas, como Canadá y Estados Unidos, que encuentran dificultades para el acceso de sus productos y servicios a esos mercados.
Quebec será la tercera cita de la Cumbre de las Américas. La primera tuvo lugar en 1994 en Miami, donde se estableció un sistema de cooperación entre todos los países que superó la estructura tradicional en torno a la Organización de los Estados Americanos (OEA). Así, se amplió la participación a otras organizaciones como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) de Naciones Unidas. La segunda reunión se produjo en 1998 en Santiago de Chile, donde se elaboró un plan de acción basado en cuatro temas: integración económica; democracia y derechos humanos; educación; y pobreza y discriminación.
Para el presidente de Estados Unidos, George Bush, esta cumbre será su estreno como líder mundial. Tres meses después de su llegada a la Casa Blanca, Bush anunció la semana pasada que intentará obtener del Congreso tras el verano la autoridad para la promoción comercial (el antiguo fast track). Este mecanismo legal autoriza al presidente a negociar acuerdos comerciales sin posibilidad de que el Congreso modifique después los acuerdos con enmiendas parciales. Seguramente, volverá a anunciarlo en Quebec.